66. Los escurridizos

Hay una especie especial específica de caballeros conocida con el nombre de escurridizos, del latín nocompromisum, más conocidos por los “sí pero no”. Hombres gentiles y de buen humor que van prometiendo con pequeños actos, barriles de eternidad para las muchachas desprevenidas. Tienen el don de la seducción a flor de piel, son encantadoramente espontáneos y no necesitan ninguna estrategia; esos artilugios se los dejamos a los feos que son los que aportan las grandes ideas al Manual de Estrategias de Levante y Abandono. Saben cuándo victimizarse al encontrarse con un alma maternal o hacerse los héroes cuando una personalidad apocopada se presenta ante sus labios. Calculan cuándo sonreír y en qué momento pegar el zarpazo. Continuar leyendo

11. La celosa empobrecida

El sexto sentido

A diferencia del caballero, es raro que una mujer sea celosa porque sí. Los celos de la mujer tienen siempre un fundamento, aunque muchas veces no comprobado, pero fundamento al fin. En el anterior post sobre El celoso papafrita, decíamos que el hombre, la mayoría de las veces queda pagando. Busca donde no hay y escucha lo que no se dijo, en cambio en el caso de la mujer pasa todo lo contrario, es raro que quede pagando, sus celos devienen de algún motivo. El sexto sentido, en general, se usa para estos casos. Continuar leyendo