De tradiciones y maltrato animal (I): las jineteadas

#DerechosAnimales

El maltrato es un tipo de violencia que se ejerce contra los animales; otros tipos son la explotación, la crueldad, el “uso instrumental” de los mismos para fines pretendidamente culturales. Ésa es la justificación usual.

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Esta es la foto de una yegua utilizada para estas “tradiciones culturales”. La yegua cayó hacia atrás en pleno relincho, se quebró el cuello y murió. Los animales mueren durante el “acontecimiento cultural”, y también antes y después: A veces mueren mientras son transportados.

Es importante entender que las yeguas no quieren ser montadas y domadas para estos acontecimientos culturales. No les causa placer, y de hecho se puede ver en las fotos que los animales no la pasan bien. Los gauchos utilizan rebenques y espuelas que lastiman a los animales.

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Foto: Animal Soy             

Yeguas, doma, montar. Una proteccionista, Andrea Heredia de Olazábal, señaló en una nota  sobre las jineteadas: Los argentinos somos víctimas del machismo y la crueldad como una muestra de virilidad. Es la forma irrisoria de mostrar la fuerza sobre un débil“, en donde los débiles suelen ser siempre los mismos: yeguas y mujeres. Pero al menos este año ha habido un avance sobre los derechos de las mujeres (humanas) en lo que toca a su participación en “espacios culturales” como éstos: han implementado las jineteadas femeninas. La violencia simbólica contra la mujer humana persiste en tanto que son hembras las montadas y domadas. Violencia machista, al margen de ser ejercida -recientemente- por artemisas y amazonas.

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Cuando un individuo sintiente (porque la capacidad de sentir es lo que nos permite empatizar con los animales no humanos) es “usado” para otro fin, lo que sucede por detrás, a nivel simbólico, es que dicho individuo deja de ser lo que es para pasar a ser una” cosa” o “instrumento”, útil a los fines de quién ejerce esa “cosificación”. Y quienes hacen uso de  otros individuos bajo esa pérdida de condición (que es dejar de ser alguien para ser algo), son los que deciden quiénes son considerados “individuo” y quienes considerados “cosa”. 

Lo importante es que, al margen de lo que los maltratadores y explotadores quieran legitimar, el maltrato es maltrato, la muerte es muerte, y el asesinato es asesinato. Sea cultural o no.

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Fíjense qué banner más bonito que se utilizó este año. Y cínico. La acusación del maltrato es mala prensa para el concluido festival, y ante las crecientes denuncias de proteccionistas sobre estos crueles acontecimientos, los organizadores han querido promover una lavada de cara para el mismo. Pero cualquiera que no tenga un corazón de piedra sabe que esto del amor entre caballos y jineteadas no existe. Claro, las tradiciones culturales pueden tener ese efecto de producir endurecimientos.

Por favor, no participes ni financies espectáculos que usen y maltraten animales, del mismo modo que no financiarías ni participarías en acontecimientos que utilicen personas humanas.

“El hombre la hace caricias al caballo para montarlo” – Facundo Cabral.

Escrito en base a unas reflexiones compartidas con Lucas Scarfia, licenciado en Filosofía del Universidad de Buenos Aires.