Todos aquellos con los que compartí este blog durante este año, han podido interiorizarse, sobre los fundamentos de la actividad, sus inicios, partes y funcionamiento de los cohetes y los motores que los impulsan. También pudieron vislumbrar el mundo de la “alta potencia”, historias de vida, proyectos experimentales y hasta, los que se animaron, pudieron construir un cohete exclusivamente con materiales caseros.
No obstante esto, y como se dice frecuentemente, sólo vislumbramos “la punta del iceberg”, ya que la cohetería ofrece múltiples aplicaciones y facetas y junto al avance de la tecnología avanzan las posibilidades y aparecen nuevos desafíos y entusiastas que se animan a enfrentarlos.
En esta nota es mi intención introducirlos en muchas de las variantes que propone la cohetería. La siguiente clasificación se realizó de acuerdo al propósito específico de cada cohete y es solo a los fines de visualizar las diferentes modalidades, ya que no siempre un modelo pertenece a una sola categoría, sino que puede ser la combinación de dos o más de ellas:
1) Modelos de uso hobbístico o científico:
a) Etapa simple
b) Cluster (Motores encendidos en forma simultánea)
c) Multi etapas (Motores encendidos secuencialmente)
2) Modelos funcionales
a) Planeadores cohete
b) Por recuperación a hélice u otro sistema.
3) Modelos a escala
4) Modelos de ficción
5) Modelos con carga útil
6) Modelos de competición
a) Modelos de altura (F.A.I. S-1)
b) Carga útil (F.AI. S-2)
c) Duración con paracaídas (F.A.I. S-3)
d) Planeadores impulsados (F.A.I. S-4)
e) Semi escala (F.A.I. S-5)
f) Duración con cinta (F.A.I. S-6)
g) Escala (F.A.I. S-7)
h) Planeadores Radiocontrolados (F.A.I. S-8)
i) Aproximación de caída.
j) Carrera.
k) Otros
Es imposible hablar de cada una de estas modalidades en una sola nota, por lo que para comenzar, voy a detallar una de las categorías competitivas, que personalmente es la que más me gusta y es la de escala.
Catalogada por la F.A.I. (Federación Aeronáutica Internacional) como S-7, es la categoría que sin dudas más horas/hombre de inversión requiere. La misma trata de construir verdaderas réplicas de cohetes, misiles o naves espaciales existentes, pero que además “deben volar”.
Al tratarse de una categoría competitiva, se realizan concursos en donde un jurado deberá evaluar: información presentada sobre el original, complejidad del modelo, grado de detalle, calidad de la construcción, calidad de la terminación, pintado y decoración. Por último se evaluará la calidad del vuelo, es decir despegue, estabilidad y recuperación, siendo muy importante que el modelo no resulte dañado.
Hay muchos casos en donde es casi imposible hacer volar un cohete que sea exactamente igual al original, debido a que los reales utilizan muchas veces sistemas de guiado como ser giróscopos y toberas basculantes, que son muy difíciles de imitar en escalas tan pequeñas, por lo que en estos casos se permite, modificar un cierto porcentaje el tamaño de las aletas estabilizadoras o fabricarlas en acrílicos transparentes, para que pasen desapercibidas.
Es por este motivo, que muchas veces a la hora de la elección del modelo a reproducir, se opta por cohetes en los cuales no corra riesgo la estabilidad del mismo, para poder garantizar todos los puntos otorgados para el vuelo del modelo.
El modelismo espacial también contempla niveles de dificultad que van del 1 al 5 a medida que se aumenta la complejidad ya sea en detalles de construcción como en la complejidad general del cohete. Es por esto que para los que recién se inician y para los chicos que realizan los cursos de modelismo, se organizan competencias de escala con modelos de nivel 2 o como mucho de nivel 3.
Aunque la categoría S7 F.A.I. Organizada normalmente dentro de la Cat. Senior (mayores de 18 años) es “a cara de perro” y donde se puede disfrutar de trabajos realmente increíbles en donde se hacen notar la gran cantidad de horas invertidas y la pasión reflejada en cada detalle que el modelista incorpora a su modelo.
Con este pantallazo, pudimos incursionar en una de las tantas modalidades de este apasionante hobby, en una próxima nota, Jorge Bonanno nos va a hablar de un cohete closter (motores de encendido simultáneo) que construyó junto a sus hijos y su padre y que tuvo un vuelo de por demás exitoso. También voy a convencer a Guille Descalzo para que nos hable un poco de la categoría de carga útil.
Roberto Müller
para Tur Aire Libre
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