Datos libres: “Se trata de una decisión política”

#OpenData

La región está latiendo para posicionarse en el mapa de países que luchan por la apertura de datos. No solo lo digo como un mensaje esperanzador, ya que el crecimiento está en pleno avance, pero sí, se están plantando hitos de progreso. Construyendo el caso para América Latina: los datos se están liberando de apoco de sus ataduras.

“Los países de Latinoamérica en general han avanzado frente a la problemática de dar acceso a los datos públicos. Si bien hay algunos países que han ido tomado la delantera producto fundamental de cuerpos legales asociados al acceso de la información, tal es el caso de México y Chile, en general en el resto de la región tienen una mirada más bien restrictiva respecto del tema del acceso” analiza el especialista internacional en innovación pública de Chile y consultor, Alejandro Barros, en una entrevista concedida a #OpenData para Infobae.

Los ciudadanos están cada vez más demandantes a medida que captan el valor de su derecho al acceso a la información pública. Barros en el mismo sentido destaca: “En los últimos años ha existido una presión importante por parte de los ciudadanos por acceder a la información en poder del Estado, por lo tanto no sería de extrañar que en el futuro inmediato los países empiecen avanzar con mayor velocidad al respecto, liberando datos que hasta hace algunos años permanecían bastante guardados”.

¿Cuál es el paradigma que enfrentan los países de América Latina, con respecto a la publicación de datos y a el acceso libre? -Barros que además es autor del libro PolisDigital, contesta- “El paradigma al cual están sujetos los países de la región fundamentalmente se basan en el secretismo y en una falta de rendición de cuentas de sus autoridades, lo cual probablemente se debe a un trasfondo más histórico y cultural de nuestros pueblos” por lo que se plantea el desafió de “que existan mecanismos para hacer pública la información y con acceso irrestricto por parte de los ciudadanos, potenciando la rendición de cuenta. Salvo en contadas excepciones, esa información en los países esta regulado como información de carácter público por las mismas leyes de transparencia. Por lo tanto, no existe ninguna razón para que esos datos no estén disponibles desde el primer momento a todos los ciudadanos sin mediar la intermediación de su solicitud”.

Valor público y valor privado, ¿De que hablamos?: “Lo que estamos diciendo es que los datos en poder del Estado, pueden tener un potencial de re-uso tremendamente grande y ese potencial está dado no solo como un atributo de transparencia, que en algún momento fue hecha utilizando los impuestos de los ciudadanos, sino que también el potencial que tienen para generar nuevos negocios. Un caso muy emblemático de esto es las conferencias de Data Palooza que se ha realizado ya en 3 oportunidades  organizado por el Ministerio de Salud de los EE.UU, en el cual el uso de esos datos han sido reutilizados por empresas privadas para generar productos de software y soluciones operacionales”.

[Beth Noveck - Ex responsable de Tecnologías de la Casa Blanca]

Entramos en el punto en el se que generan diferentes incógnitas, el planteo de modelos de negocio con datos abiertos y las empresas con participación activa en emprendimientos enlazados con información libre. Barros como Director de E.Nable , destaca que “el acceso a los datos genera múltiples beneficios y ventajas, en muchos países se han desarrollado modelos de negocios basados en datos públicos, más allá de evaluar si esos modelos de negocios han sido lo suficientemente exitosos, al menos se ven hoy día en países que esa data pública puede ser usada para desarrollar modelos de negocios, potenciando el emprendimiento y la innovación”.

-¿Cómo un gobierno puede cumplir los 8 principios de Open Data? – “En mi opinión el problema va más allá de los principios, se trata de una decisión política, en que la más alta autoridad del país tome el desafío de que los datos sean públicos. Después viene un proceso operativo de ese modelo, pero la definición de política pública de acceso a los datos tiene que ser una decisión de carácter política con un sustento de todos los poderes del estado y en una conversación muy franca y directa con la sociedad civil. Durante la Semana de la Ciencia e Innovación en México me solicitaron el análisis de el nivel de cumplimiento en el la región de dichos principios y la verdad es que la cosa deja mucho que desear, veamos por que:

• Los datos deben provenir de fuente primaria (raw data), habitualmente nos encontramos con datos pre-procesados, el paradigma se basa en el temor que existe en nuestras autoridades respecto de la potencial interpretación errónea por parte de los ciudadanos.

• Los datos deben ser liberados en forma oportuna, la publicación de los datos se realiza habitualmente con bastante desfase con el argumento de la autoridad.

• Los datos deben estar disponible a todo tipo de usuarios. En muchos casos,  se piden toda clases de acreditaciones para acceder a los mismos, argumentando sobre el uso que se le va a dar a los datos, con restricciones asociadas habitualmente a propósitos de investigación.

• Datos en formatos procesable. En muchas ocasiones corresponden a imágenes, y cuando se trata de datos procesables se utilizan formatos propietarios

• Acceso no discriminatorio a los datos. En varias oportunidades, la única forma de acceder a los datos es a través de registro pidiendo toda clase de información, con el argumento del “propósito estadístico” de los solicitantes.

• Modelo de licenciamiento no propietario. Es muy común utilizar formatos y modelos de licenciamiento propietarios, con derecho de autor, restringiendo las posibilidades de desarrollar otras actividades en torno a la data

•Completitud. El principio plantea que toda la data es pública, no sólo lo que la autoridad estime pertinente, ya que nos encontramos habitualmente con el modelo de la verdad oficial, habitualmente desde el Estado”.

Otra de las problemáticas a las que se enfrentan las administraciónes públicas es la digitalización de los datos apoyados en las históricas carpetas archivadas. El investigador de Open Data sostiene que “es todo un tema, los servicios públicos deben establecer proceso de gestión de información basada en documentos electrónicos desde ahora y, la recopilación historica deberá ser digitalizada en forma escalonada bajo estándares y archivos que garanticen su permanencia y recuperación futura [No es mucho lo que se puede hacer en términos de procesamiento automático con un archivos JPG o PNG u otro formato gráfico. Incluso esto aplica a archivos PDF que contienen imágenes. Formatos de programas productos comerciales tales como SPSS, SAS u otro software de procesamiento de datos]“, además Barros agrega que el sector público, en muchos casos, se excusa para no entregar datos “utilizando como argumento de que no es posible encontrar la información a quie la solicita o que es muy difícil su acceso”.

Los ciudadanos que están interesados en acceder a data pública como puede ser de algún sector de su comuna, tenemos que dar cuenta que este proceso de innovación en vías de prolongación, “la sociedad civil juega el rol activo”. Mayormente los modelos de acceso a la información que tiene la región está centrada en la solicitud, oseá que el ciudadano que toma la decisión de hacer el pedido de acceso está ante un Estado en modo pasivo, que absorbe solicitudes para luego tomar alguna acción. “Está metodología es llamada `modelo push´utilizado en lugar de proveer disponibilidad de datos en forma abierta, activa y tomando los principios de Open Data, que hoy existen” define Alejandro Barros.