Bon Scott, garganta con arena

#RipRock

El martes 19 de Febrero de 1980, Ronald Belford Scott se dirigió al teatro Music Machine del barrio londinense de Camden -actualmente conocido como el Camden Palace- para presenciar el show de Lonesome No More, banda en la cual por aquel entonces un jovencísimo Billy Duffy, más tarde emblemático guitarrista de The Cult, tocaba la guitarra. Scott se retiró del lugar alrededor de las 3 de la madrugada junto a un íntimo amigo de enigmático nombre, Alistair Kinnear, quien se ofreció para llevarlo hasta su piso en Victoria.

AC/DC

AC/DC, casi en pañales (de izq. a der.) Bon Scott, Malcolm Young, Phil Rudd, Angus Young

 

Durante el viaje, Kinnear percibió que Bon se había dormido; pero Kinnear no pudo ni siquiera sacarlo del coche una vez que llegaron a su destino, y optó por llevárselo a su propia casa, tras no conseguir despertar a Scott luego de varios intentos; luego de ver frustrada una vez más su tentativa de retirarlo del coche, decidió dejarlo dormir. Transcurridas 15 horas, Kinnear regresó a su auto y se encontró con Bon totalmente inconsciente; aterrorizado, lo llevó hasta el King’s College Hospital. La pesadilla se había tornado realidad y Bon ya estaba muerto. Tenía 33 años. La causa certificada de su muerte fue “intoxicación etílica” y “muerte accidental”.

Tras sí, Bon Sctott, de origen escocés, dejó en tan sólo seis discos de estudio, -‘High Voltage’ (1974); ‘TNT’ (1975); ‘Dirty Deeds Done Dirt Cheap’ (1976); ‘Let There Be Rock’ (1977); ’Powerage’ (1978) y ‘Highway to Hell’ (1979), más uno en vivo, el imprescindible ‘If you want blood (You’ve got it)’ (1978)- uno de los legados más emblemáticos del hard rock, una invalorable guía para los cantantes del género y una inequívoca marca de género para todos aquellos que quieran incursionar en el sagrado panteón de cantantes dotados de fuego en las venas.

Ronald Belford Scott (Kirriemuir, Escocia, 1946) era el cantante que necesitaba la banda desde su nacimiento tras despedir en 1974 a Dave Evans. Primero al volante de la furgoneta que transportaba a AC/DC en sus primeras giras regionales y tras su paso por The Spektors

Inmortal. La estatua de Bon en Fisherman’s Wharf (Fremantle, Australia), localidad donde Scott creció.

(donde se desempeñó como baterista), The Valentines y Fraternity, se inventó a sí mismo como prototipo del cantante descarado y bravucón con kilómetros de baldosa, que transformó a AC/DC de una banda de rock a una bomba de tiempo al límite permanente de explosión.

Bon fue incinerado y sus cenizas enterradas en el cementerio de la ciudad australiana de Fremantle; su tumba se ha convertido en uno de los iconos culturales de Australia. Tras su muerte, Brian Johnson ocupó el puesto del fallecido cantante, unos meses después de su muerte, editando otra de las gemas de la banda, ‘Back in Black’ (1980), disco que hasta la actualidad lleva 40 millones de placas vendidas.