¡S.O.S Burnout!

#SaludMental

Bienvenidos!! Hoy iniciamos el blog de Salud Mental. La idea es tratar temas que pertenece al ámbito de la psicología y actualidad. No utilizaré un lenguaje técnico ni cerrado ya que mi objetivo es llegar a trasmitir algo tanto de mi experiencia como de temas que investigo. Para comenzar, decidí hablar del Burnout

Burnout

¿Qué significa este término? Desde la traducción literal del inglés es “estar quemado” y hace alusión a personas que se sienten agotadas de su actividad laboral. Otras formas de nombrarlo son “síndrome de desgaste ocupacional” o “síndrome de trabajador consumido”.

Les recomiendo que lean la novela de Kundera La insoportable levedad del ser”, que retrata muy bien esta cuestión a través del protagonista Tomás.

* Un poco de historia…

Este síndrome fue descrito inicialmente por Herbert Freudenberger en 1974, quien observó en la mayoría de los voluntarios que trabajan en su clínica de Nueva York, luego de algunos años, “una sensación de fracaso y una experiencia agotada que resultaba de una sobrecarga por exigencias de energía, recursos personales o fuerza espiritual del trabajador”

Las causas que se pensaba llevarían a una persona a este estado serían las situaciones estresantes en el contacto directo con el sufrimiento humano, la enfermedad, el dolor o la muerte.

* Actualidad

Ahora bien, este concepto, que en un principio se pensaba como una patología que experimentan profesionales del campo asistencial (médicos, enfermeros, psicólogos, entre otros) quienes justamente se encuentran ante estas situaciones del sufrimiento humano, se ha extendido a profesiones y actividades laborales diversas (docentes, empleados de call centers, vendedores, etc.) e incluso se ha observado frecuentemente en estudiantes.

A mi entender la sociedad actual nos encuentra indefensos, vulnerables y mucho más propensos justamente a experimentar situaciones estresantes en el ámbito laboral. Las presiones por las que cada sujeto atraviesa (competencia, autoexigencias, sostener la economía del hogar, los hijos, etc.) dan como resultado en muchos casos un desgaste que tiene como consecuencia diversos síntomas.

* Síntomas frecuentes

En los dichos se revela desanimo, falta de motivación, baja autoestima, pesimismo, con sensación de fracaso constante, un agotamiento por exceso de energía puesta en el trabajo. Hay un sentimiento de impotencia, y fatiga. Por otro lado se observan cambios constantes en el estado de ánimo, irritabilidad y nerviosismo. Pueden presentar aumento del consumo de café, alcohol, medicamentos.

Nunca es suficiente la dedicación por el trabajo: horas extras, fines de semana sin descanso, llevan trabajo a la casa y sin embargo no hay de ello buenos resultados es decir se ve un descenso del rendimiento laboral. Hay una sensación de ineficacia  de que no se están llevando a cabo correctamente las tareas y de que se es incompetente en el trabajo.

El tiempo pasa y en momentos ocio no pueden descansar. Se pierde la capacidad de disfrute de aquellas cosas que antes resultaban gratificantes e incluso del propio trabajo, si es que fue elegido como profesión ó por intereses personales: anhedonia.

Por otro lado el cuerpo habla a través de diversos síntomas físicos molestos, que lo pacientes no relacionan con su situación actual sino que los sienten como síntomas aislados, con lo cuál es frecuente en las consultas a los médicos que luego de diversos estudios y análisis se concluya con una derivación al ámbito psi. Entre los síntomas más frecuentes se encuentran los dolores de cabeza, problemas en las cervicales, dificultades para conciliar el sueño, trastornos digestivos, afección de la piel a través de manchas, disnea (dificultad para respirar) entre otros.

Por otro lado socialmente suelen apartarse de los demás en el trabajo, demostrando  inconformidad con los compañeros y/o superiores por sentir que no lo tratan como se merece, que no lo valoran como deberían. En cuanto a los encuentros sociales (reuniones familiares, fiestas) no disfrutan de estar con otros, se sienten ajenos sin poder escuchar las conversaciones.

¿Qué hacer?

En primer término es fundamental que quien padezca esta sintomatología pueda detectar que algo está pasando, reconocer que llegó a un límite y poder pedir ayuda.

En la mayoría de los casos un tratamiento psicológico funciona muy bien y de ser necesario una consulta psiquiátrica para evaluar el uso de psicofámacos.

* Los Sacerdotes de Cibeles (Fábula de Esopo)

Unos sacerdotes de la diosa Cibeles tenían un asno, dicho asno lo utilizaban para cargar con sus pertenencias cuando se iban de viaje. Pero un día por mucho cansancio y agotamiento el pobre asno se murió. Para aprovecharlo decidieron fabricar unos tambores con la piel del asno muerto. Otros sacerdotes se encontraron con estos y les preguntaron que le había pasado a su asno. “Se murió de fatiga”, respondieron, “pero ahora está recibiendo más golpes de lo que recibió en toda su vida”.

Ponle un freno al desgaste laboral si no querés terminar como el asno.