¿Qué es el TOC?

#SaludMental

El TOC (Trastorno obsesivo-compulsivo), es un diagnóstico del Manual de Psiquiatría Americana DSM. Para el Psicoanálisis, estos síntomas son compatibles con el cuadro de Neurosis Obsesiva, ampliamente desarrollado en diversas partes de la obra de Sigmund Freud y que explica de manera magistral en el texto Análisis de un caso de Neurosis Obsesiva (“Caso del hombre de las ratas”) de 1909 Vamos a mencionar los criterios para el diagnóstico desde la psiquiatría y algunos aspectos psicológicos interesantes a tener en cuenta

TOC

Desarrollaremos los criterios para el diagnóstico del Trastorno obsesivo-compulsivo según la psiquatría:

Presentan de manera irracional y excesiva algunos de las características que mencionamos a continuación y que provocan un malestar clínico significativo, representan una pérdida de tiempo o interfieren marcadamente con la rutina diaria del individuo, sus relaciones laborales (o académicas) o su vida social.

1)     Obsesiones:

Pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes y persistentes que se experimentan en algún momento del trastorno como intrusos e inapropiados, y causan ansiedad o malestar significativos

Los pensamientos, impulsos o imágenes no se reducen a simples preocupaciones excesivas sobre problemas de la vida real

La persona intenta ignorar o suprimir estos pensamientos, impulsos o imágenes, o bien intenta neutralizarlos mediante otros pensamientos o actos

La persona reconoce que estos pensamientos, impulsos o imágenes obsesivos son el producto de su mente (y no vienen impuestos como en la inserción del pensamiento)

2)    Compulsiones:
Comportamientos (p. ej., lavado de manos, puesta en orden de objetos, comprobaciones) o actos mentales (p. ej., rezar, contar o repetir palabras en silencio) de carácter repetitivo, que el individuo se ve obligado a realizar en respuesta a una obsesión o con arreglo a ciertas reglas que debe seguir estrictamente
El objetivo de estos comportamientos u operaciones mentales es la prevención o reducción del malestar o la prevención de algún acontecimiento o situación negativos; sin embargo, estos comportamientos u operaciones mentales o bien no están conectados de forma realista con aquello que pretenden neutralizar o prevenir o bien resultan claramente excesivos

 

Aspectos psicológicos

¿Cuál es la presentación del cuadro de neurosis obsesiva? El tema es muy complejo en cuanto a los mecanismos, la etiología y los procesos psíquicos. A continuación mencionaré algunos rasgos descriptivos que permiten identificarlo.

Características:

En el plano mental las ideas no paran de circular: cavila, realiza planes, proyectos que nunca llega a concretar, piensa en todas las posibilidades: duda, vacila, le cuesta jugarse por algo. Se arma tal abanico de posibilidades, que lo llevan a un laberinto mental del que no puede salir y menos tomar una decisión llegando a extremos inimaginables ej. En el caso del Hombre de las ratas, Freud explica como el paciente tenía la idea obsesiva de que si se casaba con la mujer a la que amaba le sucedería algo al padre, una desgracia en el más allá (el padre estaba muerto).

Los temas predilectos en que se fija son la muerte, la duración de la vida, el más allá, la paternidad, el tiempo, el futuro, el manejo del dinero, el destino etc.

Presenta fuertes rasgos de carácter como la perseverancia, moral, obstinación y obsesión por la limpieza y el orden.

Entre los mecanismos de defensa que emplea se encuentra la “anulación retroactiva”, que consiste en deshacer en un segundo momento algo que realizó o pensó en primer momento, haciendo de cuenta como si la primer idea o acto no hubieran sucedido, como si mágicamente se pudiera modificar. En el caso mencionado antes de Freud, el paciente vuelve a colocar en un camino una piedra que, en un primer momento, había retirado para que el vehículo de la amiga no chocase contra ella.

Otro mecanismo es el “aislamiento”, que consiste en poner una pausa, aislando una idea de su contexto, quitándole así afecto y esa carga afectiva se desplaza a otras ideas que parecen insignificantes y que están bastante alejadas del conflicto original.

Se impone la realización de determinados rituales y ceremoniales obsesivos, con todo el peso religioso de la palabra. Con ellos intenta frenar impulsos  o la posibilidad de llevar a cabo actos. Ej, rezar una determinada cantidad de veces cierta oración a una hora exacta, o colocar almohadones de cierta manera particular en un cierto lugar etc.

Ambivalencia afectiva. Ama y odia al mismo objeto y vacila entre ambas tendencias, esto se demuestra en actos e ideas contradictorias dirigidas al mismo objeto.

Manifiesta dos vertientes: por un lado prohibiciones, medidas de precaución y penitencias y, por otro, una satisfacción tan sofisticada y disfrazada que resulta difícil de entender. Lo más logrado para el obsesivo es hacer coincidir estas dos tendencias en el mismo acto o idea. De esa manera, aunque parezca imposible el obsesivo logra encontrar satisfacción en la misma penitencia.

Hay un intenso sentimiento de culpa irracional y necesidad de autocastigo. Las restricciones y preceptos morales que se impone, intentan de expiar crímenes cometidos y de evitar la tentación de cometer nuevas faltas.

Su relación con quien ocupa el lugar de objeto amoroso es fallida, ya que pretende colmar la demanda del otro de diversas maneras, tratando de que no le falte nada, que no necesite nada.

Ubica a otro significativo (jefe, esposa etc.) como un amo que lo demanda, le pide, le exige cosas que intenta complacer de forma desmedida, realizando de esa manera proezas y grandes sacrificios en pos de obedecer en aquello que se le pide en buscando un reconocimiento.

Lo fundamental es que todo esto ocasiona inhibiciones, sufrimiento, angustia, pérdida de tiempo, de vínculos, insatisfacción. Emprender un tratamiento puede dar la posibilidad de realizar un trabajo que sirva para aliviar tanto malestar.

 

Marisa Fenochio