Ravel y su concierto para la mano izquierda

#ViveLaMusicaClasica

El pianista Paul Wittgenstein (1887-1961) perdió un brazo en el marco de un enfrentamiento durante la Primera guerra mundial. varios compositores, entre ellos Benjamin Britten, Paul Hindemith, Richard Strauss y Sergei Prokofiev le escribieron conciertos para que él pudiera tocarlos con sólo un brazo (o una mano como técnicamente se diría).

Sin embargo, la obra de Maurice Ravel se destaca entre todas ellas notablemente.

En este caso el trauma sufrido parece no haber conformado del todo una transformación espiritual en quien lo sufrió. Pero sin embargo produjo una de las obras maestras más maravillosas en el piano con la mitad de los mecanismos que se usan. Ni mas ni menos que con cinco dedos menos. Este hecho artístico completamente inaudito, propone un desafío extremo a las composiciones venideras, ya que pone al límite los recursos técnicos y exhorta indirectamente la óptima utilización de los recursos al servicio de la armonía y melodía.

Con esto queda demostrado que los traumas no sólo pueden destruir o potenciar el desarrollo espiritual sino también despiertan estas opciones en quienes los rodean.

TIPS

Tiene un sólo movimiento de una duración aproximada de 20 minutos. Comienza muy suave con unos arpegios muy graves en los contrabajos creando una atmósfera de suspenso, como si la niebla en la mañana en un campo (de batalla) se fuera levantando poco a poco. Un cántico muy lánguido tocado por el contrafagot (el instrumento mas grande y grave de los vientos madera) empieza a sonar en primer plano, que luego es seguido por una respuesta de los cornos franceses. Más instrumentos se suman en esta introducción y cada vez hay más sonoridades agudas que se van elevando hasta llegar (toda la orquesta) a un clímax que se interrumpe de repente con la entrada del pianista.

Este toca un largo solo (cadenza) y nos presenta uno a uno los temas de la obra. En momentos la melodía es triste mas poco a poco va recobrando energía positiva.  La música luego se desarrolla con un ritmo de tambores, casi militar, con destellos jazzísticos llenos de buen humor, de como si quisiera dejar los recuerdos del horror de la guerra atrás.

La mano izquierda de un pianista toca por lo general las teclas del registro grave del piano, por la posición en que se está sentado en el centro del teclado. Ravel hábilmente da la oportunidad por momentos a que el pianista se pueda colocar más hacia su derecha para poder tocar el registro agudo del piano. Ravel escribe un pasaje de carácter cómico que servirá de dialogo entre el piano y los instrumentos agudos de las maderas, o sea las flautas, flautín y clarinetes.

Enseguida viene un momento musical muy hermoso con un poco de estilo asiático, tal vez una reminiscencia que Ravel le da del momento en que Wittgenstein estuvo de prisionero de guerra en Siberia. La melodía, tocada por el fagot primeramente y luego por el trombón, es suave y sensual como velos volados por el aire siberiano sobre los cabellos de alguna bella doncella que se contonea cadenciosamente.

Regresa el momento cómico de la obra para dar paso a un tutti triunfal que nos prepara para el segundo solo (cadenza) del pianista. La mano se vuelve mas ágil, los dedos parecieran multiplicarse y con cada vez  más fuerza que pareciera que las dos manos están tocando. Esta es la genialidad de Ravel, de cómo hizo para que eso pareciera así. La obra concluye con unos acordes muy rítmicos para cerrar la obra en un tono triunfal.

A pesar de que la obra tuvo (y tiene) un gran éxito, Wittgenstein le quiso hacer algunas modificaciones a la obra, lo cual no le pareció bien a Ravel.

Al parecer Wittgenstein empezaba a tener conflictos consigo mismo que tiene problemas con Prokofiev, también, sobre el concierto que le escribió ya que decía que no le gustaba. Nunca lo quiso tocar.

De todos los conciertos escritos para Wittgenstein el más tocado y más famoso es el de Maurice Ravel.

¿Podría haber escrito lo mismo? ¿Es casualidad la perdida del brazo de su amigo? Para ampliar en estas cuestiones les aconsejo leer la nota de #lallavemaestra.

Siguiendo esta línea, si les interesa conocer otra producción artística de lo más misteriosa e insólita, les aconsejo la nota en #decoloresypasiones