Juan Pablo II, un hombre de Paz

Un día como hoy de 1978, el Cardenal Karol Wojtyla era consagrado Papa y bautizado como Juan Pablo II.

Una de las tantas anécdotas que dan cuenta de la calidad de persona que fue Juan Pablo tiene que ver con lo acontecido el 13 de mayo de 1981 cuando se encontraba saludando a sus fieles en la Plaza de San Pedro, Mehmet Ali Agca, un fanático religioso, intento asesinarlo de un disparo. Sin embargo, lejos de rencor y el odio, el mismo Papa, en un acto de la más pura misericordia, no fue a verlo a la cárcel, sino que además de perdonarlo, lo convirtió al cristianismo.

“La humanidad tiene la necesidad imperiosa del testimonio de jóvenes libres y valientes, que se atrevan a caminar contra corriente y a proclamar con fuerza y entusiasmo la propia fe en Dios, Señor y Salvador”

La Iglesia se dirige al hombre en pleno respeto a su libertad; propone, no impone nada; respeta las personas y las culturas, y se detiene ante el sagrario de la conciencia”