Barack Obama acaba de ser reelecto para un segundo mandato como presidente de los Estados Unidos. Su rol en el mapa del Gobierno Abierto no es menor. Hace cuatro años, en su primer día en la Casa Blanca lanzó la iniciativa de Gobierno Abierto. “Mi administración está comprometida a crear un nivel de apertura sin precedentes en el Gobierno. Vamos a trabajar juntos para asegurar la confianza pública y establecer un sistema de transparencia, participación pública y colaboración. La apertura fortalecerá nuestra democracia y promoverá la eficiencia y efectividad del Gobierno…”, decía Obama en su discurso de presentación.
[Mucho] más allá de los datos abiertos
“Las revoluciones no suceden cuando la sociedad adopta nuevas tecnologías, sino cuando se adoptan nuevos comportamientos”. (Clay Shirky)
Si pensamos que Gobierno Abierto tiene que ver sólo con abrir datos estamos errando y feo. El proceso de transformación por el que están pasando (intentando) muchísimas administraciones en el mundo (locales y nacionales) bajo el nombre de “políticas de Gobierno Abierto” tiene en su primera capa más visible el tema de los datos abiertos. Ustedes saben, rastrear la información que produce la administración pública y ofrecerla en un único punto bajo ciertas reglas oportunamente convenidas hace unos años por un grupo de expertos. Esencialmente, los datos deben poder ser leídos por una máquina y su uso debe ser libre.
Programando un mejor gobierno
“Un nuevo tipo de servicio público. Ayudando al gobierno a trabajar mejor con la ayuda de la gente y el poder de internet”.
Esta es la frase que decora el sitio oficial de Code for America (CFA) una organización sin fines de lucro, enfocada en unir la tecnología, el gobierno y la innovación, sus miembros (con un promedio de 28 años de edad) son desarrolladores de software, diseñadores, arquitectos, urbanistas y entusiastas cívicos. Muchos vienen de grandes empresas como Google o Apple, y dedicaron un año a participar en la organización.
El programa principal de CFA contacta desarrolladores con ciudades de Estados Unidos que presentan problemas específicos. Durante 11 meses esos desarrolladores pasan a formar parte de un equipo de gobierno para trabajar sobre la necesidad planteada.
“Lo que realmente hacen es mostrarle al Gobierno lo que es posible hoy a través de la tecnología”, dice Jennifer Pahlka, fundadora de CFA en su charla en TED.