“Perdona nuestra basura”, el experimento de los Güiraldes

Durante una semana, la familia Güiraldes acopió todos los envases que comúnmente tiran a la basura. ¿El resultado? Una pila de materiales valiosos y muchísima conciencia acerca de lo importante y sencillo que es reciclar.

El experimento, al que llamaron “Perdona nuestra basura“, fue idea de Pablo Güiraldes, arquitecto y urbanista, que vive en San Fernando junto a su familia. “Quería juntar todos los envases de un año, para mostrar la cantidad que se consume y tira cada día sin pensar”, contó. Con su mujer, Elena, acordaron acortar el experimento a un mes y, al primer día, se dieron cuenta de que no podrían acopiar todo por más de una semana. Cata (22), Fede (20) y Mili (12), sus hijos, y Diana, la chica que los ayuda en la limpieza, se sumaron con mucho entusiasmo.

Nuestro objetivo era demostrar con el ejemplo que transportamos plástico y otros materiales no biodegradables del supermercado a la basura en un plazo muy corto, sin pensarlo mucho y con un costo ambiental y económico altísimo”, explicó Pablo. Como vivieron un tiempo en Estados Unidos, tenían incorporadas algunas costumbres de separación de residuos y ya se ocupaban de llevar a reciclar los cartones, envases de plástico y vidrio, y de hacer compost con los residuos orgánicos. Sin embargo, en esta semana se encontraron con desafíos impensados como el de juntar los sobres de sacarina.

Al terminar el experimento, pudieron destinar a reciclaje la mayor parte de lo recopilado con excepción de los tetrapacks, los envases de mayonesa, ketchup, los sobres de sacarina y las bolsitas de plástico, que reutilizan para juntar la basura.

Además de las pilas que se ven en las fotos, para Pablo lo más importante del experimento “fue que todos se entusiasmaron mucho con la idea y eso nos demostró que no sería tan difícil reciclar si le damos un sentido y lo incorporamos a la rutina familiar“, concluyó.

Experimento totalmente apto para hacer en casa, guiño guiño.
¡Hasta la próxima!
Marian