Se dice que el Cardenal Bergoglio, cuando se entrevistaba con un dirigente político, le pedía cinco ideas de país.
Parecen muy pocas frente al torbellino de medidas que ya ha tomado S.S. en su “gobierno” y claro, como no podía ser de otra forma, no se hizo esperar nuestro tradicional “si se presenta lo voto!”. ¿Tan empecinados estamos en deseos inoperantes?
Lejos de esa fábula electoral con la que nos distraemos de nuestra responsabilidad, hoy el “Papa Bergoglio” conduce una revolución moral de aplicación práctica y el mundo entero ya se dio cuenta.
O casi todo el mundo…