¡Comenzamos!: hoy, rockumentaries

#VeoDocumentales

Hay muchos que discuten sobre si  el documental es o no un género. Hay otros tantos que consideran que el documental directamente no es cine. Son los que, cuando decimos  que miramos documentales, se quedan anonadados y después preguntan si nunca miramos “películas”.

Después hay algunos  que piensan que los  documentales son objetos televisivos no  del  todo identificados  que están allí para instruirnos y  mostrarnos cuándo y cómo  tiene lugar la reproducción de las termitas, o cuál es el comportamiento de las aves( estos documentales son maravillosos también – ya lo veremos- pero claramente no son los únicos).

Finalmente están  (estamos) todos aquellos que pensamos  lo contrario,  y tratamos de mantenernos al día ante la imparable lluvia de material que hay por todos lados.

No es la idea de este blog debatir a nivel teórico sobre el estatuto del documental, ni  las diferentes corrientes que tuvieron lugar a lo largo de su historia (que nació con el cine mismo, allá por 1895); aunque para quienes quieran indagar un poco más  puedo  recomendar la biblia del documental, que es este esclarecedor texto en el que Bill Nichols ordena los modos de representación que sobrevuelan el género.
Lo que me sí me gustaría es que todos los que amamos el género y que (hay que decirlo) nos divertimos más con un documental sobre *casi* cualquier cosa que con una remake de Hollywood cuya versión original seguramente haya sido mejor, encontremos un espacio lleno de títulos y de videos, conocidos y por conocer, y ampliemos nuestro universo de documentales hasta donde internet nos lo permita.

A mí el documental es un género que me emociona mucho y hasta he llorado con alguno que otro. Les juro que se puede.

Por eso quiero dar inicio a este blog escribiendo sobre los documentales más emocionantes (en el múltiple sentido de la palabra):  los rockumentaries ( y si cabe expresión, más puntualmente sobre los ‘punkumentaries’)

Los rockumentaries  probablemente  sean conocidos  tanto por los fanáticos de la música  como  por los  que van a cancherear  a las funciones de los festivales de cine- que suelen tener secciones especiales dedicadas al subgénero- y  son, en líneas (muy) generales,  aquellos documentales que se centran en bandas  de rock o en artistas particulares.

Hay muchos que  son históricos e imperdibles  ( Don’t look back, sobre Dylan, Gimme Shelter y Sympathy for the Devil sobre los Stones,  The Kids Are Alright sobre The Who, End of the Century sobre los Ramones) y hay  otros  que  no son  tan históricos pero sí igual de necesarios ( The Devil and Daniel Johnston, The agony and the ecstasy of Phil Spector, Dig!, Anvil). De  ellos me encargaré en un post siguiente.

Documentales sobre punk, Vol. 1

Los punkumentaries tienen varios  exponentes, pero para empezar  voy a elegir a  Lech Kowalski y Julien Temple. (no me olvido de Don Letts,  no, pero lo dejo de lado momentáneamente).

Creo que debería haber, directamente, otro subgénero (dentro de este subgénero de subgénero) llamado “documentales de Julien Temple”, porque es  uno de los autores más geniales de la historia del documental.
Pero volvamos al punk. Puedo recomendar dos trilogías de cada uno de estos autores para aquellos que estén interesados en la historia y en la movida punk  que los dejarán más que satisfechos. En primer lugar está  la que forman D.O.A (1980), Born To Lose:  The Last Rock and Roll Movie  (1999) y Hey! Is Dee Dee  home? (2003), de Kowalski .

En segundo lugar (pero no por eso menos importante, más bien todo lo contrario) tenemos la de Temple:  The filth and the fury (2000), Joe Strummer: The Future Is Unwritten (2007) y Oil City Confidential (2009).
En D.O.A, como podrán ver en este precario video, se trata de hacer una historia del punk rock con la gira de los Pistols en Norteamérica allá por 1978 – año del principio del fin- como epicentro.

http://youtu.be/lDlpwfTj_34

Este documental es oro en polvo no solo por el archivo de presentaciones de Los Pistols y bandas como Sham 69, sino porque incluye esta tristemente célebre entrevista   a Sid y Nancy  poco tiempo antes de que suceda la debacle.

Aquí vemos a  Nancy  hablando pestes de Rotten y al pobre Sid que  bueno…intenta (sin mucho éxito) mantenerse despierto. Esta entrevista será incluida también en The filth and the fury,  ya que es una pieza de archivo bastante especial.

Born to lose  es una suerte de biopic de  Johnny Thunders, líder de los New York Dolls primero y de The heartbreakers  después,  que incluye una enorme cantidad de material de archivo (videos sobre los primeros shows de los Dolls, 16 mm sobre los Heartbreakers) y entrevistas a figuras del punk  ( del archivo de las entrevistas realizadas a Dee Dee Ramone para este film surge  Hey, is Dee Dee Home?), así como  un recorrido por la carrera de Thunders, su adicción a la heroína y su extraña muerte.

Por último está Hey, is  Dee Dee  Home? , que surge como homenaje, tras la muerte del bajista, y a raíz de lo ya generado en Born To Lose. Acá vemos al personaje de Dee Dee  contar la historia de sus tatuajes, sus novias y sus bandas.

En este link se puede ver online, solo hay que bajarse antes este programita gracias al cual eludiremos las cuestiones de IP que nos molestan, y listo.

Si quieren elegir uno vean D.O.A, es el más completito y el mejor. Acá les dejo al director hablando de la película :

Los documentales de la  trilogía punk de Temple – y otras de sus genialidades- tendrán lugar en el próximo post.