La misión de Miami y San Antonio era recuperar el partido que habían perdido en su casa. Enfrente tenían a dos equipos que los están complicando más de lo pensado. Chicago, disminuido por las lesiones, se dejó llevar por la intensidad y perdió los estribos. Golden State puso en evidencia su falta de variantes cuando las figuras no están en su mejor noche. Así los candidatos recuperaron la ventaja de localía este viernes.