“Estaba jugando con un arma que no sé de dónde salió. Lo apuntó a uno de los chicos y no pasó nada; lo apuntó a otro y no pasó nada. Al final se puso el arma en la sien y salió el disparo. Fue un juego y no sé por qué ocurrió”. Esas fueran las palabras de José Luis Gozalo, el manager de Walter Olmos, cuando le preguntaron qué pasó. Fue hace ya 12 años, un 8 de septiembre de 2002. Tenía 20 años, hacía tan sólo dos que estaba en la cresta luego del apadrinamiento de Rodrigo. Antes hacía shows en Catamarca, de donde él era. Mucho antes pedía en la calle o salía a robar. Es la historia del muchacho que nace pobre y se encuentra de golpe con la fama.
En una entrevista, días antes de hacer dos fechas en el Luna Park en el 2001, contó: “Uno no se fuma o chorea por hobby, por gusto. Yo por lo menos no lo hice. Pero tenía nueve hermanos. Ahora mismo lo digo: si a mí se me acaba lo del canto y, siendo el mayor de los hermanos, veo que no tienen nada de comer, yo salgo a robar de vuelta. Ese es mi pensamiento. Uno por comer hace cualquier cosa. Y después están los que empiezan para comer y después ya no paran, eso también es así.”