Según una encuesta publicada recientemente por el diario The Independent, durante el verano aumentan nuestras chances en la seducción. Las razones de este fenómeno parecen ser obvias: salimos más, tenemos vacaciones y la atmósfera general da una “sensación térmica” diferente. Aún así, recogimos en este breve artículo algunas de las claves que los expertos en seducción enumeran como ABC del levante:
1- No “fichar” y la regla de los 3 segundos
Martín Rieznik, co-autor del manual “El Juego de la Seducción. Todo el lo que un hombre debe saber sobre las mujeres”, explica que fichar – un comportamiento muy común entre el sedcutor inexperto – reduce ampliamente las chances de comenzar una interacción con una desconocida. Según el autor, cuyo libro lleva más de 3000 copias vendidas en Argentina, en la mayoría de los casos en los que un hombre ficha, el encare ni siquiera llega a concretarse. Rieznik agrega que a medida que pasan los minutos, y mientras el hombre piensa la frase más ingeniosa para acercarse, la ansiedad y el miedo al rechazo aumentan exponencialmente. Es por eso que cualquier forma de empezar la conversación nos parece estúpida luego de pensarla durante algunos segundos. Y aunque la frase perfecta apareciera en la imaginación de “el mirón”, la forma de comunicarse con la mujer resultaría demasiado forzada y la respuesta recibida por su “objetivo” no sería la esperada.
En contrapartida, su propuesta es desarrollar un estado de sociabilidad permanente e interactuar con diferentes grupos para después elegir qué mujer nos interesa o resulta atractiva. Abrir diferentes conversaciones e interactuar con distintos grupos cuando las mujeres no nos resulten particularmente atractivas. Por otro lado, si nos encontramos en la situación de estar frente a una mujer que nos interesa y queremos iniciar una conversación, Rieznik recomienda utilizar la regla de los 3 segundos; “No dejar pasar más que ese tiempo desde el momento en que vemos a esa mujer, para empezar a hablarle”.
2- Lenguaje corporal
En su libro “Seductor Infalible. Guía para desarrollar una personalidad atractiva”, Germán Muhlenberg subraya la importancia del lenguaje corporal en la seducción: “El lenguaje corporal es una expresión de nuestras emociones. Si estamos tristes, el cuerpo tiende a encorvarse y encogerse. Cuando uno se abre y se extiende, cambian también las emociones. Y por el contrario, si estamos contentos pero nos colocamos en posturas cerradas o sumisas, cambiarán nuestras emociones a sentimientos más negativos. Teniendo en cuenta que el 85% de la comunicación es no verbal podemos deducir que no es tan importante el “qué” se dice sino el “cómo”. Lo primero que hace una chica cuando se le acerca un hombre, es observarlo de pies a cabeza, su forma de hablar, su ropa, su estilo, como se mueve, ¿está temblando? Todo esto en sólo unos segundos.”
¿Cuál es entonces el lenguaje corporal de un buen sedcutor? Muhlenberg explica que “ Aquellos que mantienen sus manos visibles dan signos de confianza y sinceridad. Poner las manos en los bolsillos o detrás de la espalda es una actitud da desconfianza, como si hubiera algo que se oculta. Por eso, si buscamos una postura atractiva, es mejor evitar tener las manos en los bolsillos. Si descansamos el peso del cuerpo sobre una pierna, estamos transmitiendo sensación de cansancio y la fatiga no resulta atractiva. Lo mejor es pararse con el peso repartido en ambas piernas y mantenerlas separadas a la distancia del ancho de hombros. Tener una postura derecha, mentón en alto (no mirar para abajo), sacando pecho, con los hombros para atrás (tampoco exageradamente), estar relajados. También es recomendable ir a un gimnasio, o hacer algún deporte, no solo para moldear el cuerpo, sino que ayuda a sentirse mejor y desarrollar autoestima.”
3- Objetos y accesorios
Mike Tabaschek, coautor junto a Rieznik de “El juego de la Seducción” propone utilizar uno o dos objetos que llamen la atención para amplificar nuestra respuesta en el campo de acción. Los elemetos a utilizar depeden exclusivamente de la personalidad de cada uno, pero como ejemplos pueden ser “un sombrero, una brujula, un cinturón exótico, una muñequera o incluso un libro. Estos elementos no solo despiertan la curiosidad de las mujeres sino que también “le otorgará a ella una excusa perfecta para poder abrirnos, preguntándonos por el objeto sin que sus intenciones queden demasiado expuestas. No muy a menudo se atreve una mujer a preguntarnos por una camisa o un jean, por temor a ser demasiado obvia o parecer fácil. En cambio, si se acerca a preguntarnos por qué tenemos una brújula, ella queda resguardada por el pretexto verosímil de que sólo se ha aproximado a nosotros para averiguar por ese objeto. De este modo, se asegura una salida fácil en caso de que todo salga mal o descubra que estamos con nuestra novia.”
* Descargá gratis los primeros capítulos de “El Juego de la Seducción” de Martín Rieznik y Mike Tabaschek, en la web de la editorial Dibuks.
* Más información sobre el libro “Seductor Infalible” (2014) de Germán Muhlenberg.