1983. Guerra Fría y datos abiertos

El 7 de septiembre de 1983, Japón y Estados Unidos publicaron la transcripción de comunicaciones soviéticas interceptadas por una base de inteligencia japonesa en una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.  10 años más tarde, ante un cambio de gobierno, la USSR publicó las transcripciones que incluían también la comunicación de la cabina del avión.

El conjunto de transcripciones corresponden al vuelo Korean AIR 007 que con 269 pasajeros más tripulación realizaba un viaje desde Nueva York a Seúl, y sobre la isla de Moneron fue derribado por jets soviéticos el 1 de septiembre de 1983 cuando sobrevolaba territorio ruso restringido.

Hasta el día de hoy muchos detalles del vuelo son desconocidos. La Unión Soviética afirmaba desconocer el carácter comercial del vuelo y sugirió que había entrado en el espacio aéreo soviético como una acción deliberada para poner a prueba sus capacidades de respuesta y realizar tareas de espionaje, en algunos casos disfrazando aviones espía como aviones comerciales.

El entonces presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, condenó el incidente del 1 de septiembre llamándolo la “masacre de la aerolínea coreana”. Al día siguiente la Unión Soviética admitió derribar el KAL 007 declarando que los pilotos no sabían que era un avión de pasajeros.

El error de navegación del KAL 007 se produjo al fijar el piloto automático en marcación constante magnética en vez de hacerlo en el modo de puntos de avance. Como la computadora de a bordo marcaba las coordenadas constantes, la tripulación no advirtió que estaba a 550 km más hacia el norte que la ruta prevista, violando efectivamente en dos oportunidades el espacio aéreo soviético.

Datos Abiertos

Tras el incidente, Reagan firmó una orden ejecutiva para que la tecnología de GPS estuviera disponible para uso civil una vez  finalizada (17 años más tarde). Inicialmente, la calidad más alta de señal estuvo reservada para uso militar y la señal civil fue intencionalmente debilitada. Esto cambió cuando en el 2001, el presidente Bill Clinton ordenó eliminar la diferencia de señales mejorando la precisión del GPS Civil de 100 metros a 20.

Las aplicaciones civiles desarrolladas a partir de la disponibilización pública del GPS son incontables: Astronomía, cartografía, telefonía móvil, Sincronización de relojes, asistencia ante emergencias, rescates y desastres, trackeo de vehículos, geolocalización, navegación (terrestre, peatonal, marítima y áérea), robótica, deportes áereos, construcción (nivelación de terrenos, cortes, tendido de tuberías), etc etc.

¿Es entonces, Ronald Reagan el padre de Foursquare? (como Tim O `Reilly mencionó en alguna de sus conferencias?), no sé, lo que sí es cierto es que el caso del GPS demuestra una vez más el gran potencial detrás de la idea del gobierno como plataforma sobre la cual la sociedad puede crear nuevos servicios y aplicar su creatividad para el bien común.

Gobierno Abierto en la agenda del G8

Este año el Reino Unido tiene a cargo la presidencia del G8 (Estados Unidos, Reino Unido, Japón, Italia, Francia, Canadá, Rusia y Alemania). En una carta enviada por el primer ministro británico David Cameron al grupo queda en claro que los temas de Gobierno Abierto están fuertemente posicionados en la agenda.

Estos son algunos de los párrafos de la carta:

El foco principal de mi agenda para el Summit está puesto en los tres siguientes temas: promover el comercio, asegurar el cumplimiento del pago de impuestos, y fomentar mayor transparencia. Considero que el G8 puede tener un rol muy importante en todos estos temas, utilizando nuestro compromiso para abrir economías y sociedades para que puedan darle apoyo a esta iniciativa y generen crecimiento económico.

En nuestra alianza con países menos desarrollados y economías emergentes, creo que debemos poner un énfasis nuevo y práctico sobre lo que se refiere a transparencia, rendición de cuentas y gobierno abierto.  Demasiados países en vías de desarrollo se ven privados de unirse por cuestiones de corrupción, y esto podría estar potenciado o incluso alentado por malas prácticas de negocios y falta de transparencia por parte de quienes comercian con ellos.

El G8 puede dar soporte también a los ladrillos de crecimiento subyacentes, incluyendo el estado de derecho, la ausencia de conflicto y corrupción, y la presencia de derechos de propiedad e instituciones fuertes -lo que he denominado el “hilo de oro” que hace que las economías y sociedades abiertas sean los mejores cimientos para el crecimiento. Espero que nuestro trabajo demuestre que no se trata solamente de lo que los países en vías de desarrollo hacen. Nosotros, en el mundo desarrollado, necesitamos trabajar conjuntamente con ellos para prevenir el lavado de dinero y erradicar las coimas y la corrupción. Necesitamos analizar cómo mejorar la transparencia -incluyendo la iniciativa de transparencia en el sector de la construcción y también nuevas ideas, como una alianza global de transparencia.

Pueden leer la carta completa de Cameron acá.