Tratamientos de Reproducción Asistida: Guía básica para familiares y amigos. Parte 1

#MedicinaReproductiva

Y resulta que ya consultaste al especialista, hiciste todos los estudios que te pidieron y tenés finalmente un diagnóstico (o no), que justifica porque el embarazo no llega… y ahora qué?

Lógicamente, nunca falta el entorno: familiares, compañeros de trabajo y amigos que preguntan (y opinan), y vos intentás traducir un montón de palabras difíciles que te dijo tu médico: ehh bue… me dijo que tengo que hacerme “una asistida” , ah no, era.. ehmm:  una “inseminación in vitro”, no no… una fertilización intrauterina. mmmno, no era así creo…

Bueno, paremos las rotativas, mejor mostrales este post:

Los Tratamientos de Reproducción Asistida se dividen según sea su complejidad  baja o alta. Es decir, si podemos lograr que la fertilización del óvulo se produzca dentro del cuerpo de la mujer  será un tratamiento de Baja complejidad y si la formación del embrión debe ser en el laboratorio, estaremos hablando de uno de Alta complejidad.

Tratamientos de Baja complejidad:

Tu médico te dice que para embarazarte, van a necesitar “un empujoncito” y que en tu caso se puede empezar por el primer escalón: los tratamientos de baja complejidad:

Si esta fue la propuesta, quiere decir que no hay un problema severo que impida el embarazo, sólo se trata de aumentar las chances mediante un tratamiento que aumente la posibilidad de fecundación del óvulo.

Esto puede ocurrir en mujeres que no ovulan normalmente y necesitan medicación para inducir su ciclo, o si hubiera alguna alteración leve en el espermograma. Eso si, es importante asegurarse previamente mediante una histerosalpingografía, que al menos una de las trompas de Falopio está permeable, es decir que no hay obstrucción que impida el encuentro entre el espermatozoide y el óvulo.

Entonces, los tratamientos de Baja complejidad,  son las técnicas de Reproducción Asistida en donde la fertilización se produce en la trompa de Falopio.

Suele indicarse una estimulación ovárica previa, para obtener más óvulos disponibles y aumentar así las chances de embarazo. La estimulación ovárica debe ser controlada por el médico para evitar una respuesta ovárica excesiva, es decir una cantidad inadecuada de óvulos disponibles, que propicien un embarazo múltiple.

Relaciones programadas

Si la mujer es joven, pueden intentarse unos ciclos de relaciones programadas.

Normalmente, las mujeres producen un solo óvulo por ciclo menstrual. El objetivo de este tratamiento es producir mayor cantidad de óvulos mediante medicación (estimulación ovárica), para incrementar la posibilidad de embarazo y asesorar acerca del momento óptimo para mantener relaciones sexuales.

Inseminación intrauterina

Consiste en la introducción de una cánula a través del cuello uterino con el fin de depositar el semen mejorado (con un procedimiento de selección de los mejores espermatozoides llamado swim-up) en el interior de la cavidad uterina, y cercano a las trompas. Esto se realiza en el momento de la ovulación, que es programada por el médico, y suele acompañarse también de una estimulación ovárica.

Estos tratamientos aproximan la chance de embarazo de la pareja subfértil a la misma posibilidad de embarazo por ciclo del 15-20% que tienen las parejas que no tienen dificutades para concebir.

En el próximo post: Tratamientos de Alta Complejidad.

Dra. Sandra Miasnik

https://www.facebook.com/Dra.SandraMiasnik