#YoVi The Killers

#YoVi

Fui a muchos recitales en los últimos años y podría decirse que de los ritmos más variados, pero nunca había estado en un show de un grupo como The Killers, aunque sabía que eran buenos y me entusiasmaba la idea.

Tengo que reconocer que esta vez todos los pronósticos en mi cabeza eran malos. El cielo amenazaba con una tormenta desde la tarde y yo venía de empaparme hace poco en el Ultra Music Festival. Fui preparada para no resfriarme de nuevo: llevé mi piloto con capucha y hasta una funda especial para proteger a mi celular del agua.

Otra contra era el estacionamiento. Totalmente lleno y con una cola larguísima, quedaba a la deriva de lo que quisieran cobrarme los ‘trapitos’. A eso le sumaba que encima el lunes feriado me tocaba levantarme temprano por mis obligaciones laborales.

Pero de a poquito todo se fue acomodando: no sólo no llovió durante todo el show, sino que el ‘trapito’ fue tan amable que me pidió sólo 15 pesos. Además, el recital fue tan breve como brillante y yo pude descansar como quería.

Si hay algo que digo siempre que voy a un show es que “no deberían durar más de una hora y media” y The Killers me demostró que tengo razón. En una hora y veinte minutos lograron interpretar 16 temas con un sonido impecable y con Brandon Flowers en su máxima expresión.

Sin decir esas frases típicas que me molestan, como “Buenos Aires es mi público preferido” o “ustedes son mis mejores fans”, la banda se sumó al cantar popular que entonaba “Olé, olé, olé olé, Killers, Killers”, sin ser obsecuentes con el país que los recibía, pero entusiasmando a todos los seguidores argentinos.

La noche fue perfecta y el ambiente era totalmente familiar. Me encontré rodeada de padres jóvenes (y cancheros) con sus hijos a caballito enseñándoles las canciones en inglés a sus hijos y explicándoles por qué el show no terminaba cuando la banda dejaba el escenario, sino cuando lo dejaba por segunda vez.

Además del buen clima y la alegría del lugar, era imposible que el estilo de esta banda no me hiciera recordar vivencias personales de esta última década: sonaron en cada evento importante, como fiestas, casamientos y graduaciones, que hoy en día se siguen llenando de temas de The Killers para bailar o para disfrutar de algún video.

Para no aburrirlos demasiado con lo que me parece esta banda, porque creo que queda claro que ¡me encanta!, podría resumirlo diciendo que no es fácil que una mujer cambie su estado anímico cuando está muy metida en su negatividad, pero The Killers me hizo absorber la buena onda que enviaba desde el escenario e hizo que viviera una noche perfecta.

Ah, y a los chicos de la banda tampoco les fue mal. Los cantantes se fueron en una combi ni bien terminaron de tocar, pero antes de llegar al hotel pararon en La Costanera para deleitarse con un choripán, el gran manjar argentino. ¡Otro homenaje a sus fans del país!

Por Natalí Harari
@NatiHarari