El arte ancestral de cargar a nuestros hijos

#SerMadres

Cangureando

Me interesé en el porteo desde antes del nacimiento de mi hijo. Sabía que esperaba a un bebé que llegaría antes de tiempo y la idea del Método Madre Canguro de algún modo me consolaba.

Y así comenzó un largo camino de aprendizaje que ya lleva más de 3 años. Tímido al comienzo, apasionado luego. Con mucho de autodidacta, pero también enriquecido por las enseñanzas de mi maestra y tocaya española.

¿Pero qué es esto del porteo? Quizás algunas personas nunca lo han escuchado. A mí me gusta describirlo como un arte ancestral que nos brinda la oportunidad única de conectarnos piel a piel con nuestros hijos desde el momento en que nacen. Porque es mucho más que transportarlos en un portabebé. Portear es conectarnos profundamente con ellos.

Resulta que además de ser una experiencia hermosa, tiene muchos beneficios. Ante todo, el porteo brinda al bebé una gran sensación de seguridad y tranquilidad. Ser porteado lo ayuda a dormir mejor y a reducir el estrés, lo que se traduce también en una reducción visible del llanto. Pensemos que un bebé estuvo meses y meses dentro del útero materno, que es cálido, húmedo, totalmente perfecto. El mundo exterior puede ser muy hostil. Por eso el porteo desde el nacimiento nos permite lograr que su transición al exterior sea mucho más respetuosa y amable. Además -y gracias a los estudios relacionados con el Método Madre Canguro- ahora sabemos que de esta manera los sistemas del bebé funcionan óptimamente: que tiene un menor gasto energético (por lo cual gana peso con mayor facilidad); que regula mejor su temperatura corporal; que tiene una mejor digestión (evitando y/o reduciendo molestias relacionadas al sistema digestivo, como los cólicos); que sincroniza la respiración con el adulto; que estabiliza su frecuencia cardíaca; que tiene un desarrollo óptimo del sistema óseo (el porteo ergonómico protege el desarrollo de la espalda y la cadera, previniendo, por ejemplo, la displasia); y muchas evidencias más.

Y como si todo eso fuera poco, el porteo potencia el vínculo mamá-bebé y la adaptación del recién nacido a la vida familiar, favorece la lactancia materna, estimula los sentidos del bebé desde la seguridad que le brinda el cuerpo del adulto, e incluso se ha demostrado que los bebés porteados aprenden más y puntúan más alto en los test de inteligencia al año de vida.

Portear además se convierte en una herramienta para la vida cotidiana. Para quien portea no sólo es cómodo y le permite tener las manos libres, sino que también ayuda al fortalecimiento progresivo de sus músculos y previene los típicos dolores posturales, óseos y musculares que pueden generarse por llevar al bebé en brazos. Quien portea aumenta su autonomía y movilidad (sabemos lo poco práctico que puede ser moverse en la ciudad con un cochecito), lo cual le da la oportunidad de integrar al bebé desde muy temprano a la vida familiar y social. Esto genera mayor confianza en los padres. Además, quienes portean conocen más a sus hijos y aprenden a detectar sus necesidades con mayor rapidez. Las madres que portean tienen menos posibilidades de sufrir depresión posparto porque segregan mayores cantidades de oxitocina (la hormona del amor) y prolactina (hormona que estimula la producción de la leche materna).

Será por todo esto o quizás simplemente porque disfruto tanto el llevar a mi hijo que hice del porteo mi bandera y creé Cangureando, con la intención de acompañar a las familias que desean portear a sus bebés. Con mucho amor y dedicación Cangureando crece día a día, suma miles de seguidores y los talleres se pueblan de madres, padres y niños que vienen a aprender, a divertirse y a conectarse. Y con felicidad este mes sumo consultorio privado, para que acceder al porteo sea aun más fácil y cómodo para todos. Tengo, además, el honor de tener el aval de la marca N° 1 en portabebés ergonómicos, Cerquita Mío, y que hoy Cangureando se presenta como asesoría oficial de CQM.

El porteo en Argentina se está comenzando a difundir. De la mano de una crianza respetuosa y amorosa, y de una conexión plena con las necesidades de nuestros bebés.

El porteo es mucho más que portabebés. ¿Te animás a descubrirlo?

 

CANGUREANDO

Porteo ergonómico, seguro y respetuoso en la Ciudad de Buenos Aires

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