57. Los amigos, esos socorristas del amor

“Del infierno se sale mirando al cielo”
Vicente Zito Lema
 

Lo peor del abandono es la sensación de desamparo. La muerte, al lado del desamparo, es una pluma en la planta del pie. El miedo no es a la muerte, es al desamparo. El abandono es arena en los ojos donde pareciera que el oxígeno huye con la ausencia. Quedarse solo es ver como el globo se desinfla, como el helado se derrite y como se te inunda la carpa. Continuar leyendo

41. Fase 4: El amor realista

El amor ideal

Llegamos a la cuarta fase del proceso amoroso y, como decía el gran ilusionista, siempre puede fallar. Las fantasías de las novelas y los estereotipos del corazón suelen mostrarnos cinematográficamente el ideal del romanticismo. Vamos tras ese príncipe encantador o la doncella glamorosa con la intención que sólo la muerte separe tan magnifica unión y que las perdices abunden en la mesa de roble cercana a la chimenea y a los Toblerone. Sea por ideal a alcanzar o por escepticismo, ese amor ideal no deja ser un patrón identitario. Sin embargo, con los años, se comprueba que se puede amar sin la luna de fondo, sin el abrumador sonido del mar y sin crepúsculos sureños. Continuar leyendo

34. Receta para infieles

La prehistoria

Los que se habla sobre la infidelidad va por un lado y los que se hace con los cuernos va por el otro. Es una acción donde rara vez lo que se dice coincide con lo que se hace. Hace siglos, al ser infiel, se le busca el antídoto adecuado pero sin obtener ningún tipo de éxito. Hay casos donde la infidelidad es un problema de uno y hay otros donde es un problema del otro. ¿Por qué será que algo tan cuestionado por la mayoría tenga tanta añejidad? Narcisismo al margen, ¿es tan importante como dicen? O puertas adentro salta la posta, que en general es mucho más grave. ¿Y si no salta? Continuar leyendo

31. Las parejas complementarias

Ella Digital, él Analógico.

Breve historia de señales que pueden llevar decenas de tiempo y docenas de conclusiones. Posiblemente no sepan que a pesar de ser opuestos dialécticos, no se excluyen, ni se acotan al ámbito de los vínculos eléctricos y las relaciones informáticas, tampoco, entre ellos, son buenos o malos, mejores ni peores. Continuar leyendo

23. El después del amor

“Dolido: Imaginándose muerto, el sujeto amoroso

ve la vida del ser amado continuar como si nada hubiera ocurrido”.

(Roland Barthes, “Fragmento de un discurso amoroso”)

 

Listo, ya fue. No da para más, cada cual a su cucha.

Todos esos lindos momentos compartidos, esas vacaciones, la noche que amanecieron por primera vez, el día que ella usó tu camisa, la tarde que él te dio de fumar. Cuando te hiciste el macanudo con su abuela, cuando le llevaste la chocotorta a la madre para el cumpleaños. La mañana que corrieron a la farmacia para comprar la pastillita, la noche que ella te dijo que “todos estamos solos”. El día que le dijiste que no te enamorabas así porque sí. Los muditos, la taquicardia y el siestero. Hablar del futuro, coincidir en los proyectos, fantasear con una familia. La primera vez que cocinaron juntos, aquel concierto y aquella película. El día que tu amigo te dijo que ella era recopada, el día que tú amiga te dijo que él era un dulce. La pelea adentro del auto… la reconciliación. Continuar leyendo

2. Los actos heroicos y el amor

Las personas que se están separando creen que lo único que los puede salvar del estallido es un acto heroico. Un salto al vacío sin medir las consecuencias, una decisión para la foto.

Básicamente un acto heroico es hacer todo lo contrario a lo que te dicen tus amigos. Te sugieren que no la llames y la llamás. Te ordenan que no lo veas y lo ves.

Hacerse el héroe para unir lo que se acaba de romper tiene un mal destino. Valiente es el que acepta la goleada. Continuar leyendo