78. Los vínculos puente

- No sé si voy a poder hacerlo.
- ¿El qué?
- Intentar concentrar toda mi vida entre hoy y el viernes.
Los puentes de Madison, 1995.

 

Los clavos no son una buena metáfora para el amor. Mientras el clavo inmoviliza y elimina el movimiento, el viento sabe dónde y cómo soplar. Depender de un clavo para que saque a otro clavo denota claramente la falta de herramientas para tales fines y un escasísimo sentido de la creatividad. La pretensión de que una nueva presencia hace olvidar una gran ausencia empobrece el día a día y nos transforma en seres compulsivos en busca de un parche con el contorno de una figura humana. Continuar leyendo

77. El que deja y el dejado

“Las palabras nunca alcanzan
cuando lo que hay que decir desborda el alma”.
Julio Cortázar
 

No hay peor noticia que el común acuerdo. Separarse de común acuerdo empobrece el delicado vértigo de aprender de una ruptura y una separación insulsa corresponde a un tibio transitar sin pena, sin gloria y sin pasión. Contra el común acuerdo, está bueno que en una separación uno corra con la culpa y el otro con el abandono; ahí hay sangre, abismo, turbulencia. Si las parejas se separaran de común acuerdo, chau poesía.  Continuar leyendo

73. La crueldad en el amor

“La crueldad en el amor se siente cuando
dejas de pensar en eso que te enamoró”.
Pablo Neruda
 

“Yo no me merecía esto. Puse lo mejor de mí para que funcionara y mirá como terminamos… entre silencios y reproches. Lo que más me duele es que te creí. Te creí cuando me hablabas del futuro, de que nos íbamos a ir de vacaciones a La Pedrera. Te creí cuando en Falabella me dijiste que te gustaban los muebles blancos. Confié en esa mirada cristalina que sostenía con firmeza todo lo que pensaba. ¿Será que las personas de ojos claros son peligrosas? Continuar leyendo

64. Cuando dejamos de amar

Viene todo bien, la hermana te cayó divina, te gusta su forma de pensar, parece una persona seria. Te divierte; y hasta no te da miedo pensar en el futuro. Te fuiste de vacaciones, como un modo de probar a ver qué onda y funcionó. Sabe cuando tiene que callarse y cerrar esa bocota; sabe cuando tiene que meter un chiste para descomprimir tu mala onda. Continuar leyendo

53. Las 50 preguntas más comunes del amor

escudo azul

Tanto por euforia como por disforia el amor se hace presente (o ausente) en nuestra vida cotidiana a través de preguntas que en su gran mayoría no tienen respuestas y, cuando aparecen, enturbian el pensamiento y manosean las emociones porque como decía Blanchot “la respuesta es la desgracia de la pregunta”. Continuar leyendo

50. ¿Vale la pena casarse?

“Las etapas más felices en la pareja son
antes de conocerse y después de separarse”.
Osvaldo Acedo
 

Dicen que el matrimonio es una institución, a una institución se la relaciona con un establecimiento, un establecimiento remite a lo establecido, lo rígido. Las cosas rígidas cumplen la función de no dejarse vencer, es decir, no admiten ningún tipo de transformación. Lo establecido marca pautas de funcionamiento y comparte protocolos de adecuación a la vida cotidiana. La iglesia y el Rotary Club aportan la tinta del papel prensa de lo legal, desconociendo lo legítimo. Continuar leyendo

49. Dame otra oportunidad, Normi.

San Justo, 23 de agosto de 2013

 

Querida Normi:

                              Te escribo porque no doy más. Me di cuenta que no puedo vivir sin vos, que fui un nabo y que tenés razón en todo lo que decís. Soy un barrilete, una cometa que quiere que el viento lo devuelva a tu corazón, necesito que me des otra oportunidad. Me arrepiento de todas las veces que me pedías que hable y yo me quedaba callado, sin saber qué decirte. No era falta de interés lo que pasa que yo tengo muchos problemas, sabés que con el tema del flete no me va del todo bien y pero te juro que estoy dispuesto a todo para que me aceptes de nuevo en tu vida. Uno valora lo que tiene cuando lo pierde y yo me di cuenta que sos un pulmón para mi. Vos me hacías rescatarme, antes de conocerte andaba re duro todo el día pero cuando empecé a estar con vos… no te digo que nunca más… pero mucho menos que antes. Si, te mentí en eso también, cuando iba a ver al Globo un tirito me tomaba, pero al toque me rescataba eh! Vos siempre fuiste como una madre para mi, que me decías lo que tenía que hacer; y ahora a la distancia valoro y extraño que me estés encima. Continuar leyendo

41. Fase 4: El amor realista

El amor ideal

Llegamos a la cuarta fase del proceso amoroso y, como decía el gran ilusionista, siempre puede fallar. Las fantasías de las novelas y los estereotipos del corazón suelen mostrarnos cinematográficamente el ideal del romanticismo. Vamos tras ese príncipe encantador o la doncella glamorosa con la intención que sólo la muerte separe tan magnifica unión y que las perdices abunden en la mesa de roble cercana a la chimenea y a los Toblerone. Sea por ideal a alcanzar o por escepticismo, ese amor ideal no deja ser un patrón identitario. Sin embargo, con los años, se comprueba que se puede amar sin la luna de fondo, sin el abrumador sonido del mar y sin crepúsculos sureños. Continuar leyendo

36. El proceso del duelo amoroso

Ya está bien, es suficiente. Demasiado tiempo solo. No doy (ni recibo) más. Estoy triste y desalentado. Ya pasó más de un año y esto en la garganta me sigue y me persigue. ¿Qué carajo es estar solo? Sentís que se te viene encima un nuevo fin de semana y te gustaría detener el tiempo en un frasco. La mayoría de la gente me tiene lástima, y sobre todo los que están en pareja, odio esas mesas para cuatro cuando somos tres. Trato de no tocar el tema pero en algún momento el Sr. Malbec destraba esa maldita evitación y arranca la catarata. Que jugó conmigo, que no tiene corazón, que las pocas veces que nos vimos en el último año me miró con pena y que odio que se haga la macanuda. Continuar leyendo