118. Las primeras etapas de una separacion

1. Sorpresa

Muchos sostienen que con el tiempo la pasión decae. Y, en nombre de eso, se bancan lo peores ninguneos. Pero a veces, decae el vínculo, y cuando eso sucede, la relación explota en cuestión de días. Uno de los dos comienza a comportarse cada vez más raro, se abraza al silencio como quien quiere huir del conflicto, como quien esconde la mano después del piedrazo.

Entonces preguntás qué pasa y ahí ocurre la primera detonación. Creés que es un mal sueño, quedás en estado de shock. No podes creer que esa persona tan cercana, ahora parezca tan lejana. Continuar leyendo

86. Separate y listo

Como si fuera tan fácil. Una separación es el inicio de otras separaciones; distancias que a la larga te van acercando más a vos mismo. No hay separaciones infelices, si dolorosas, agónicas y traumáticas, separaciones que atraviesan un dolor para evitar una dolencia mayor, pero… insisto, a la larga separarse siempre es buen negocio. Por supuesto que no hay un interruptor de emociones que con su sola activación genere el deseo de olvidar. De afuera es matemático, de adentro es filosófico. El de afuera lo ve sencillo: si ya no lo querés, si ya no te calienta, te aburre, no soportás lo que dice ni cómo lo dice… entonces separate. Si cuando los jueves se va a jugar al futbol te sentís aliviada, y cuando trabaja hasta tarde te alegra no tener que dar la vuelta al perro… entonces separate.

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77. El que deja y el dejado

“Las palabras nunca alcanzan
cuando lo que hay que decir desborda el alma”.
Julio Cortázar
 

No hay peor noticia que el común acuerdo. Separarse de común acuerdo empobrece el delicado vértigo de aprender de una ruptura y una separación insulsa corresponde a un tibio transitar sin pena, sin gloria y sin pasión. Contra el común acuerdo, está bueno que en una separación uno corra con la culpa y el otro con el abandono; ahí hay sangre, abismo, turbulencia. Si las parejas se separaran de común acuerdo, chau poesía.  Continuar leyendo

76. El cornudo

Parece un chiste, pero todos los años, el domingo más cercano al 11 de noviembre se conmemora el día del cornudo. Una celebración nacida en un pueblo italiano de unos 200 habitantes llamado Rocca Canterano, donde cada año se celebra la Festa dei Cornuti. El evento consiste en homenajear a San Martín, obispo de Tours y patrón de todos aquellos a quien su pareja ha engañado en un momento de sus vidas. Preside el sencillo homenaje un personaje al que llaman el “gran cornudo del año”, que lleva en su cabeza unos cuernos prominentes simbolizando la infidelidad. Mientras tanto, en los alrededores, suena música medieval y varios juglares cuentan historias sobre hombres engañados y desdichados. En el Imperio Romano, cuando el guerrero se ausentaba por largos periodos; a su regreso, le regalaban un par de enormes cuernos rodeados de monedas y, en muchos casos, con la noticia de que en su ausencia, sus esposas habían incursionado en nuevos amores. Continuar leyendo

73. La crueldad en el amor

“La crueldad en el amor se siente cuando
dejas de pensar en eso que te enamoró”.
Pablo Neruda
 

“Yo no me merecía esto. Puse lo mejor de mí para que funcionara y mirá como terminamos… entre silencios y reproches. Lo que más me duele es que te creí. Te creí cuando me hablabas del futuro, de que nos íbamos a ir de vacaciones a La Pedrera. Te creí cuando en Falabella me dijiste que te gustaban los muebles blancos. Confié en esa mirada cristalina que sostenía con firmeza todo lo que pensaba. ¿Será que las personas de ojos claros son peligrosas? Continuar leyendo

71. Cómo pensar una crisis

La crisis como nudo

Y de pronto el silencio. El goteo de la canilla de la cocina se vuelve a escuchar incesante. La tele del vecino repiquetea los oídos del consorcio elevando la voz de ese conductor maníaco que se hace el tarado pero no es ningún boludo. Atrás quedaron las horas inciertas, que me voy yo, que te vas vos, que pensémoslo mejor y que “no sea tan cruel, no busques más pretextos”. Acaba de desarmarse el ring, ese escenario gris que fue testigo del derrumbe, fotografías en primer plano de sobredosis de crueldades y demasías de energía, puestas al servicio de destruir al otro para salvarse uno. ¿Por qué se seguirá recurriendo a ese artilugio desesperado de hundir al otro para salvarse semánticamente de nada? Hacerse el Pablo Escobar con los corazones de la gente, lejos de hacerte un triunfador, te convierte en un papa frita. Continuar leyendo

64. Cuando dejamos de amar

Viene todo bien, la hermana te cayó divina, te gusta su forma de pensar, parece una persona seria. Te divierte; y hasta no te da miedo pensar en el futuro. Te fuiste de vacaciones, como un modo de probar a ver qué onda y funcionó. Sabe cuando tiene que callarse y cerrar esa bocota; sabe cuando tiene que meter un chiste para descomprimir tu mala onda. Continuar leyendo

57. Los amigos, esos socorristas del amor

“Del infierno se sale mirando al cielo”
Vicente Zito Lema
 

Lo peor del abandono es la sensación de desamparo. La muerte, al lado del desamparo, es una pluma en la planta del pie. El miedo no es a la muerte, es al desamparo. El abandono es arena en los ojos donde pareciera que el oxígeno huye con la ausencia. Quedarse solo es ver como el globo se desinfla, como el helado se derrite y como se te inunda la carpa. Continuar leyendo

53. Las 50 preguntas más comunes del amor

escudo azul

Tanto por euforia como por disforia el amor se hace presente (o ausente) en nuestra vida cotidiana a través de preguntas que en su gran mayoría no tienen respuestas y, cuando aparecen, enturbian el pensamiento y manosean las emociones porque como decía Blanchot “la respuesta es la desgracia de la pregunta”. Continuar leyendo

49. Dame otra oportunidad, Normi.

San Justo, 23 de agosto de 2013

 

Querida Normi:

                              Te escribo porque no doy más. Me di cuenta que no puedo vivir sin vos, que fui un nabo y que tenés razón en todo lo que decís. Soy un barrilete, una cometa que quiere que el viento lo devuelva a tu corazón, necesito que me des otra oportunidad. Me arrepiento de todas las veces que me pedías que hable y yo me quedaba callado, sin saber qué decirte. No era falta de interés lo que pasa que yo tengo muchos problemas, sabés que con el tema del flete no me va del todo bien y pero te juro que estoy dispuesto a todo para que me aceptes de nuevo en tu vida. Uno valora lo que tiene cuando lo pierde y yo me di cuenta que sos un pulmón para mi. Vos me hacías rescatarme, antes de conocerte andaba re duro todo el día pero cuando empecé a estar con vos… no te digo que nunca más… pero mucho menos que antes. Si, te mentí en eso también, cuando iba a ver al Globo un tirito me tomaba, pero al toque me rescataba eh! Vos siempre fuiste como una madre para mi, que me decías lo que tenía que hacer; y ahora a la distancia valoro y extraño que me estés encima. Continuar leyendo