Verano: Alimentos que hidratan

Si quieres estar hidratado, no es necesario no separarte de tu botella de agua o gaseosa preferido. Conoce aquí los alimentos que pueden ayudarte.

Por su alto contenido en agua y sus propiedades, estos alimentos te ayudarán en la tarea de recuperar el cuerpo del desgaste de las altas temperaturas.

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Digestiones pesadas

Comer sentados y con tranquilidad parece haber quedado en el olvido. Y cuando a las prisas diarias se le añaden unos hábitos alimentarios poco saludables, se originan malas digestiones, dolor de estómago, acidez y otros trastornos digestivos.

Si los excesos se prolongan en el tiempo, aumenta el riesgo de aparición o desarrollo de patologías relacionadas con la alimentación, como enfermedades cardiovasculares, diabetes, hipertensión, obesidad, alteraciones digestivas…

Los trastornos digestivos cobran relevancia en épocas como la Navidad, fechas en las que es difícil huir de las comidas copiosas. La frase “un día es un día” nos empuja a abusar de la comida y de la bebida, siendo casi imposible salir indemne de sufrir incidentes digestivos. Hay que recordar que las grandes comilonas y el ingerir muy rápido los alimentos obligan al estómago a trabajar mucho más de lo habitual, con la consiguiente sensación de malestar y pesadez. Seguir unas sencillas pautas nos ayudará a prevenir las molestias digestivas.

Tranquilidad y buenos alimentos
Los alimentos o platos demasiado grasos (fritos, estofados o guisos con exceso de aceite) o que incluyen carnes muy grasas, platos con salsas,quesos o mayonesa, platos muy condimentados, picantes o los alimentos excesivamente azucarados provocan digestiones más lentas y pesadas de lo normal. Si, además, no guardamos orden en el horario y distribución de las comidas a lo largo del día, y por ejemplo, un día no desayunamos, otro casi no comemos y al siguiente tomamos una gran cena, nuestro aparato digestivo acabará sufriendo las consecuencias.
Tampoco el estrés es buen aliado para las dolencias estomacales: numerosos estudios lo han relacionado con afecciones gastrointestinales (úlceras, cólicos, diarreas, gastritis…), por lo que además de seguir una buena alimentación, resulta muy importante aprender a llevar un ritmo de vida más relajado y a evitar el estrés.

La buena siesta
A pesar de que la siesta se considera un hábito muy saludable, si se prolonga más de 15-20 minutos y se realiza al poco de comer, probablemente despertaremos con la sensación de que la comida no ha sido digerida, nos dolerá la cabeza y sentiremos acidez y malestar general. Esto se debe a que cuando dormimos todo funciona más lentamente en nuestro cuerpo, incluida la digestión, y a que en posición horizontal se facilita el paso de ácidos de estómago a esófago (reflujo). Para remediarlo, deberemos hacer una siesta de corta duración y, en lugar de acostarnos, permanecer recostados en el sofá.

Cómo prevenir y aliviar algunas de las molestias digestivas más comunes

Indigestión
La digestión es un proceso muy lento que se alarga cuando se ingiere demasiada comida o alimentos excesivamente ricos en grasa o fibra. Al producir más ácidos para ayudar en la digestión, el tracto intestinal se hincha. Otra forma de indigestión es la que produce hinchazón del abdomen, que se manifiesta cuando el estómago se siente demasiado lleno y que suele producir flatulencia.
Para disminuir estas molestias:
• Tomar de postre ananá fresca, ya que contienen papaína y bromelina respectivamente, enzimas que favorecen la digestión de las proteínas.
• No abusar de carnes, fiambres y embutidos, alimentos ricos en proteínas y grasas. Mejor dar prioridad al pavo y a las aves de caza de temporada, menos indigestos que el cordero o el pato (carnes mucho más grasas).
• Sustituir el café por infusiones digestivas (manzanilla, menta, hinojo, comino o salvia).
• Si sabemos de antemano que tendremos una “comida especial”, debemos compensarlo realizando el resto de comidas del día más ligeras de lo habitual.

Nauseas y vómitos
Ya sea por consumo de alimentos en mal estado o por exceso de alcohol, el vómito es síntoma de que el cuerpo trata de liberarse de un elemento tóxico. Tras los vómitos y para evitar la deshidratación, resulta fundamental asegurar un adecuado aporte de líquidos, pero conviene esperar 1-2 horas antes de tomar cualquier bebida. A medida que los vómitos cesan se puede iniciar la ingesta de alimentos sólidos. Se toleran mejor los alimentos secos: tostadas, galletas sencillas…

Algunos remedios caseros:
• Infusión de jengibre (se troza y pulveriza, se añade una cucharada sopera por cada taza de agua y se hierve 3-5 minutos), ideal para combatir las malas digestiones acompañadas de náuseas, vómitos, mareos y para eliminar gases.
Flatulencia
Exceso de gases en el intestino que causa espasmos intestinales y distensión abdominal (se hincha el abdomen). Cambios bruscos en la alimentación, comer deprisa y tragar demasiado aire mientras se mastica, un consumo excesivo de hidratos de carbono (arroz, pasta, papa, pan, cereales, galletas, etc.), el empleo de antibióticos que desequilibran la flora intestinal y la ingesta de alimentos flatulentos (alimentos productores de gas y formadores de olor) pueden originarla.
Para prevenir esta incomoda molestia se recomienda:
• masticar bien los alimentos, comer y beber despacio.
• no realizar comidas copiosas o de condimentación fuerte y emplear hierbas aromáticas que ayudan a la digestión (romero, salvia, tomillo, hinojo).
• evitar los alimentos o platos muy grasos y salsas fuertes.
• cocer bien la pasta, no comer pan recién horneado tipo baguette ni verduras y legumbres flatulentas (ajo, cebolla y pimientos crudos, coles,, etc.).
• Sustituir café, descafeinado y té por infusiones de menta, salvia o de hinojo, o añadir unos granos de anís verde, hinojo o comino a una infusión de manzanilla, ya que ayudan a la digestión, y de hierbabuena, que relaja los músculos del colon (intestino grueso), lo que ayuda a aliviar las molestias del exceso de gases.
• El yogur contiene bacterias que ayudan a equilibrar la flora del intestino, por lo que están especialmente recomendados.

Dispepsia

La dispepsia es el dolor o malestar epigástrico durante al menos tres meses en un paciente que no refiere acidez predominante o regurgitación.

Un quinto de la población se ve afectada en algún momento de sus vidas. Es una condición crónica con una naturaleza evolutiva con recaídas y remisiones. En la mayoría de los pacientes, no hay causa para la dispepsia que se detecte en la endoscopia.

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Fitoesteroles para bajar el colesterol

Los fitoesteroles son sustancias químicas parecidas al colesterol que se encuentran principalmente en plantas y vegetales verdes ó amarillos y en una variedad de alimentos, incluyendo verduras, frutas, granos integrales, frutos secos, semillas de calabazas, soja y arroz integral.

Los fitoesteroles y sus formas reducidas, los fitoestanoles, son esteroles de origen vegetal ampliamente distribuidos en la naturaleza y cuya estructura es muy similar a la del colesterol.

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Alergia alimentaria

Una alergia alimentaria es una respuesta exagerada del sistema inmunológico por el consumo de un alimento en particular.

Hay que diferenciarlo de la intolerancia alimentaria, que no es una reacción alérgica, pero constituye un efecto indeseable producido por la ingestión de un alimento determinado.

Los alimentos que con más frecuencia producen alergia son la leche, los huevos, el marisco, las nueces, el trigo, los maní, la soja y el chocolate.

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Alimentación para el embarazo

Numerosos estudios demuestran la relación existente entre la alimentación materna durante la gestación y la salud y crecimiento de su niño. Especial relación existe entre la dieta materna y el desarrollo neurológico, por ejemplo: se conoce que una alimentación deficiente en ácido fólico puede ocasionar defectos en la médula espinal.

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Alimentación para la salud del cabello

Si bien los factores que inciden para provocar la alopecia son diversos (hormonales, estrés, utilización excesiva de productos químicos, enfermedades, cambios hormonales, edad, herencia genética, entre muchas otras causas. Pero una de ellas, y la más fácil de atacar, es la de una mala alimentación.

Una buena alimentación por sí sola nunca será suficiente para resolver los problemas capilares, pero es seguro que la mala alimentación puede empeorar la situación de nuestro cabello, privándolo de los nutrientes adecuados que le permiten estar brillante, fuerte y saludable.

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La importancia de los minerales en el cuerpo

Los minerales son tan importantes como las vitaminas para lograr el mantenimiento del cuerpo en perfecto estado de salud. Pero, como el organismo no puede fabricarlos, debe utilizar las fuentes exteriores de los mismos, como son los alimentos, los suplementos nutritivos, la respiración y la absorción a través de la piel, para poder asegurar un adecuado suministro de ellos. Después de la incorporación al organismo, los minerales no permanecen estáticos, sino que son transportados a todo el cuerpo y eliminados por excreción.

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Alimentos orgánicos

En español, se los denomina biológico, ecológico u orgánico y son sinónimos que se utilizan para designar los alimentos que cuidan tanto la salud de los consumidores como el equilibrio del medio ambiente en que se producen.

 

En los últimos años se han hecho muy populares los alimentos llamados orgánicos, demostrando el interés de mucha gente por un cambio positivo en la alimentación y también la desconfianza en la seguridad y producción de los alimentos convencionales.

Se consideran “orgánicos” aquellos alimentos, en general vegetales y frutas que en ninguna etapa de su producción intervienen fertilizantes, herbicidas o pesticidas químicos, así como tampoco en los suelos donde son cultivados.

En realidad las características positivas que se le atribuyen a los productos orgánicos son difíciles de establecer mientras no exista una regulación general. Por ejemplo para que la leche, sea considerada orgánica, en teoría la vaca debe estar alimentada 100 % con granos que no hayan sido tratados genéticamente ni fertilizados sus suelos. Así como tampoco deben recibir antibióticos u hormonas dichos animales.

Es muy difícil lograr producir alimentos que estén totalmente libres de pesticidas, debido a que en los suelos éstos permanecen largos periodos de tiempo en cantidades insignificantes o pueden contaminarse de suelos próximos a ellos.

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