Los Esteros del Iberá, según hallamos en la web es una angosta red que abarca entre 15.000 y 25.000 km² en la provincia de Corrientes. Solo superado en extensión por el Pantanal (brasileño, boliviano y paraguayo) con el cual forman el segundo humedal más grande del mundo, parte de un sistema hidrográfico mucho más extenso —el macrosistema del Iberá, de cerca de 1 ha— en el que se desarrolla un ecosistema tropical de grandísima diversidad.
Para nosotros es otra opción de buceo, muy diferente al que podemos realizar en la costa Argentina; donde además de disfrutar de un fin de semana en el campo, rodeado de naturaleza, lejos del ruido y de los celulares. Podemos realizar la especialidad de buceo conocida como buceo en corriente, (drift current en inglés), donde salimos desde la Laguna Itatí, en la naciente del rio corrientes y recorremos este río (vaya la redundancia de buceo en corriente en el rio corrientes), recorriendo largas extensiones bajo el agua a profundidades no mayores a los 8 metros con posones que pueden llegar a los 14 metros y superamos los 3 Kms de recorrido.
El Lugar
Nos encontramos en la ciudad de Mercedes, provincia de Corrientes, con nuestro guía Sergio Della Rosa, un amigo, buceador, buen hacedor de chistes y mejores asados, que hace años nos lleva a disfrutar de los Esteros.
Desde allí vamos a la estancia El Dorado a unos 80 kilómetros de Mercedes, por una ruta mejorada, que cuando llueve con anterioridad se torna en toda una aventura para los amantes de las cuatro por cuatro. Pero esta vez el fin de semana del 27 y 28 se setiembre, el clima fue más benigno y nos permitió llegar sin contratiempos.
La estancia
El casco de la estancia en muy bonito y confortable, habiendo habitaciones para aquellos que lo deseen y también es posible acampar alrededor de este, contando con toda su infraestructura. En nuestro caso es una sola noche donde además, para los que les guste cazar pueden acompañar a Sergio o solo contemplar las estrellas en este lugar tan pristino.
El Buceo
Para realizar el buceo, debemos llevar todo, desde los cilindros, los plomos o lastres y el compresor para carga de los tanques, además de los equipos Scuba necesarios de cada buceador. En la estancia se ofrecen todas las comidas, bebidas y el servicio de transporte de las lanchas que nos van acompañando todo el recorrido.
Nos llevan o vamos caminando hasta embarcar en una picada cavada en la tierra, que nos lleva hasta el rio Corrientes. Embarcamos en unos lanchones planos, sin quilla muy utilizados en esta zona por los isleños.
La temperatura del agua estaba en los 20 a 21 grados, lo cual es muy confortable para aquellos que estamos acostumbrados a bucear en nuestras aguas frías. Usamos un traje monopieza de 5 mm, sin casco, con botas cortas y sin guantes, aunque hay algunos que prefieren el equipo completo.
La visibilidad ronda los 5 a 6 metros pudiendo llegar a más, cuando hay buenas condiciones del agua. Es un buceo sin estrés, donde todo es disfrute, nos dejamos llevar por la corriente y si somos buenos observadores y buscamos el veril, podemos encontrarnos con abundantes fauna, surubí, boga, sábalo, rayas, viejas del agua y por supuesto el dorado o doradillo el cual nos pasa a tanta velocidad que las fotos salen siempre desenfocadas.
No así con los surubies, rayas o viejas del agua que posan en el fondo hasta que les caemos encima para inmortalizarlos en la foto. Disculpa para aquellos que son fotógrafos, por la calidad de las fotos donde aclaro no ser buen fotógrafo.
El inconveniente es por la corriente, que no permite enfocar con precisión y el pez que tampoco se queda muy quieto. Bueno espero que les guste este destino, que se los recomiendo como uno de mis preferidos en Argentina.
Para aquellos que les guste la cabalgata también es posible realizar una recorrida por la estancia.
Ing. Guillermo Scionico
para Tur Aire Libre
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