Por: Olivia D.
En nuestro post anterior les contamos como hacer uso eficiente de los objetos de decoración cuando nos mudamos a nuestro primer hogar “compartido”. Hoy les traemos un extra para contarles cómo puede cada uno (hombre o mujer) encontrar su espacio dentro del hogar.
Un rincón para cada uno
Muchas veces surge la duda sobre el género de los objetos: “tal cosa es muy femenina o tal es muy masculina”. Por eso, hablando en términos de decoración, busquen que los espacios comunes (living, comedor y cocina) sean neutros y hablen de los dos. Después cada uno se adueñará de un rincón donde expresarse, porque todos sabemos que en cualquier parte necesitamos nuestro espacio.
Para ellas, los detalles siempre van a ser suyos. Las lucesitas de colores, las velas, las borlas, o la deco del toilette. Materiales como la cerámica o el crochet identifican más lo femenino. ¡No dejen nunca esos detalles, son los que aportan calidez al hogar!
Para ellos, un balcón o un patio siempre puede ser un buen espacio de hombres y más si hay una parrilla. Ese es un buen lugar para armar un sector masculino; un abridor atornillado a la pared, una mesa de hierro y madera y los típicos utensilios son suficientes para que puedan reunirse a tomar una cerveza con amigos. Sino algún escritorio o barra dentro de la casa. Los materiales como la chapa, el hierro o una madera maciza identifican más lo masculino.
Busquen un rincón en su hogar y decórenlo con las cosas que más les gustan. Y si no, recuerden que al menos son dueños de sus mesitas de luz