Por: Paula Denis
El verano terminó, el otoño va ganando terreno y nos anticipa un invierno frío… Tan frio que, entre chocolates y salsas, nos hace olvidar todo lo que nos costó entrar en la bikini. El secreto está en mantener una dieta equilibrada durante todo el año, por eso en este post la Dietista y Licenciada en Nutrición del Centro Terapéutico Máximo Ravenna, Liliana Grimberg (MAT UBA 978), nos cuenta los mitos y secretos de una alimentación saludable.
“La base de una alimentación saludable es comer en forma suficiente para cubrir las exigencias y mantener el equilibrio del organismo, que sea completa y variada en su composición diaria, de todos los nutrientes y en ciertas cantidades y proporciones, según la edad y estado biológico”, dice la Coordinadora del Área de Nutrición del Centro Terapéutico Máximo Ravenna.
Hay ciertos hábitos alimenticios que el común de la gente cree sano, sin embargo, estos mitos llevados a la rutina de una dietan diaria pueden afectar nuestra salud, por ejemplo:
1. No comer: Mucha gente opta por comer solo de noche. Algunos no desayunan ni meriendan, pero almuerzan y cenan en exceso.
2. Consumir fruta libremente: Las frutas tienen muchas propiedades y pueden ser utilizadas en desayunos, merienda o postre. Pero en exceso, suman una gran cantidad de calorías y azúcar.
3. No medir el aceite: Una nutritiva y poco calórica ensalada puede convertirse en la peor enemiga si se le agrega aceite de más. Una cucharada tiene 100 calorías: 4 cucharadas equivalen a dos canelones con salsa. Así que, a medir con cuidado a la hora de condimentar.
4. Otro error común es usar aceite de oliva en abundancia, pensando que es light, cuando tiene las mismas calorías que los otros.
5. Pensar que los productos integrales son “light”: Es cierto que hacen bien, son ricos en fibra y dan mayor saciedad. Pero están lejos de tener menos calorías. De hecho, a veces tienen más grasa que los alimentos que no son integrales. Por eso, a consumirlos, pero con medida.
6. Licuar las frutas o hacer puré las verduras: Cuanto más procesado está un alimento, menos trabajo digestivo -o gasto de calorías- demanda. Sacia menos y resulta poco efectivo para bajar de peso.
7. Al mediodía comer una “ensaladita de verduras”: Parece saludable, pero para ser un almuerzo completo, la ensalada debería combinar vegetales de hoja verde, verduras de color (tomate, zanahoria o remolacha) y una porción de proteínas como huevo queso, carnes blancas o rojas.
8. Tomar poco líquido
9. No realizar cuatro comidas
- Consejos para una dieta equilibrada:
1. Consumir todos los días leche, yogures o quesos, es necesario en todas las edades. Nos aporta proteínas completas y es fuente de calcio y vitaminas.
2. Comer diariamente frutas y verduras de todo tipo y color. Fuente de vitamina C y A de fibra y minerales como potasio y magnesio.
3. Comer una amplia variedad de carnes rojas y blancas, retirando la grasa visible. Fuente de proteínas de buena calidad y de hierro.
4. Preparar las comidas con aceite crudo y evitar la grasa para cocinar.
5. Disminuir los consumos de sal.
6. Consumir variedad de cereales integrales y legumbres.
7. Disminuir el consumo de bebidas alcohólicas y evitarlo en niños, adolescentes, embarazadas y madres lactantes.
8. Tomar abundante cantidad de agua potable durante todo el día.
9. Limitar el consumo de harinas refinadas, azúcar, grasas, productos de copetín y panadería.
+Colaboración:
Liliana Grimberg – Dietista y Lic. en Nutrición (MAT UBA 978)
Centro Terapéutico Máximo Ravenna
+Info: www.maximoravenna.com