A diferencia de otros años, esta vez el río de la Plata, en promedio, dio menos pejerreyes de gran tamaño. Eso no quiere decir que, cuando la temperatura del agua se vaya templando, a medida que se acerca la primavera, los grandes digan presentes antes del momento en que abandonan el estuario para volver al mar.
La pesca embarcada en el río más ancho del mundo cada vez gana más adeptos, pues, a lo señalado de los buenos portes, debe sumarse que, para la gran masa de pescadores de pejerrey que vive en Buenos Aires y su cinturón, o La Plata y alrededores, es como pescar en el patio. Si bien a veces hay que navegar un par de horas para llegar, por ejemplo, a costa uruguaya, donde suele haber más y mejor pique, siempre se parte de puertos ubicados en la costa firme argentina, relativamente cerca del domicilio del pescador, lo que le permite suspender si, por ejemplo, se anuncia mal clima, sin haber gastado tiempo y dinero en un viaje de muchos kilómetros. En forma similar, pero opuesta, se puede organizar de un día para otro una excursión mirando el pronóstico de vientos y lluvias, ya que “queda cerca”.
Habitué cada vez más frecuente de la zona norte del Plata, mi amigo Roberto Ayala, gran pescador de pejerrey, invitó recientemente a otro excelente conocedor, Pablo Boffill e hicieron una linda pesca, pero fueron un poco más al norte, al río Uruguay, zarpando desde Villa Paranacito, la Venecia entrerriana.
Se encontraron con que el límite internacional se encontraba muy crecido, por las lluvias que habían azotado su cuenca superior y las aguas bajaban relativamente transparentes pero con muchísimo camalote derivando, lo que obliga a corregir constantemente las líneas, ya que las boyas derivan en la gareteada cubriendo gran parte de la cancha elegida para pescar.
En este caso, probaron desde la boca del Brazo Chico hasta el Obelisco, sesenta por ciento del día sobre los bancos (a unos dos mil metros de la costa argentina) y el resto sobre el veril del canal recostado sobre costa uruguaya.
La pesca fue muy dura en el trucker de Pablo, ya que no sopló una gota de viento en casi todo el día y el pejerrey, gran consumidor de oxígeno, necesita de aguas rizadas para no ralentizar su comportamiento. Así y todo lograron 44 piezas, algunas de buen tamaño, sin llegar a los “monstruos” de esta zona que este año, al menos hasta ahora, faltaron a su cita, pero que se espera, como comenté antes, que aparezcan para el final de temporada.
Villa Paranacito es otro de los pesqueros cercanos a Buenos Aires, ya que, yendo por la Panamericana y luego la autopista de la Ruta Nacional 14 se tarda poco más de dos horas en alcanzarlo. Importante: sacar permiso de pesca al lado de la caminera de Ibicuy, pues de vuelta suele haber controles. Aún con el permiso no traer más de diez pejerreyes ¡por vehículo! ¿Suena exiguo? Totalmente. Vaya a saber cuáles son los fundamentos para permitir tan amarreta cantidad de peces, cuando se ven mallones por todos lados haciendo estragos con las poblaciones de todo tipo de peces.
Maravillosamente, las grandes crecidas de este año le vinieron muy bien a la población de pejerreyes, ya que se ven muchos juveniles y las pescas son buenas, al menos en cantidad de peces. Están tomando en brazoladas cortas, de cinco a treinta centímetros, con anzuelos grandes (1/0 en adelante para ser más selectivos), boyas de colores y tamaños que permitan que el pescador las vea bien a una buena distancia y ceba chorreando al lado de la lancha para armar una calle que los atraiga. Cuando hay viento es fundamental usar un ancla de capa para frenar la deriva.
En Villa Paranacito hay alojamiento en la ciudad y también la ya mítica hostería Rosemary, sobre el arroyo Martínez a dos minutos de la boca del Uruguay, con la siempre buena atención de Carlitos y su gente.
Tanto el Plata como el Bajo Uruguay cuentan con muy buenos guías de pesca. Si precisás alguno, no tenés nada más que escribirme a mi mail, que figura arriba donde están mis datos, e indicarme para qué pesquero (San Fernando, Tigre, Vicente López, Quilmes, Berisso, Magdalena, Zárate, Brazo Largo o Villa Paranacito), entonces te paso los datos de los mejores.
Néstor Saavedra
para TurAireLibre
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