Durante muchos años fue una zona “olvidada” por y para la pesca deportiva. Algunos guías que tenían sus embarcaciones en las cercanías del puente Zárate-Brazo Largo sobre el Paraná Guazú recorrían la zona cercana a esta magna obra de vialidad inaugurada hace 35 años. Cuando salían aguas arriba era raro que superaran la boca del Paraná Bravo.
Estoy aludiendo a la boca del Paraná Guazú sobre el río de la Plata, sector que visitamos en compañía de los amigos de Pro Silver, encabezados por Ariel Romero y con la visita de Gabriel Tres enla comodísima lancha, equipada con las plataformas de popa y proa para pescar muy cómodamente en la modalidad que más nos gusta, el baitcast.
Gozamos de un día fresco a frío, pero sin el viento, que tanto molesta para navegar en un río profundo y para derivar correctamente, aunque esta embarcación tiene motor eléctrico manejado a control remoto, otro excelente auxiliar para el pescador, ya que el motor a explosión espanta mucho más a los peces.
La técnica fue, precisamente, en lugares donde el gran volumen de agua del Guazú chocaba contra árboles hundidos, garetear paralelamente a la costa para lanzar con señuelos de paleta corta e intermedia, los preferidos en esta época por los dorados. Aunque puede hacerse una muy linda pesca variada con carnada natural preferimos por los artificiales, que le dan mucho dinamismo a la salida. Usamos cañas de acción de punta o rápidas, con reeles rotativos chicos, cargados con unos cien metros de multifibra 0,22 a 0,26 mm. Para evitar los cortes que el dorado realiza con sus filosos dientes le añadimos un cable de acero de viente libras y veinte centímetros con un snap fuerte, pues fácilmente un dorado de tres kilos en adelante abren los de mala calidad. No es necesario usar esmerillón, salvo que se empleen cucharas giratorias, que no fue nuestro caso este día y que no las recomendamos en un lugar tan lleno de palos, pues se enganchan normalmente.
Esta pesca es muy divertida porque importa mucho el lanzamiento: hay que ser precisos para aprovechar el lugar en que el agua corre fuertemente y está más oxigenada, donde suelen vivir los dorados más grandes. Los mejores lugares de pique los tuvimos aguas abajo de la boca del Ceibito y en la boca del Ceibo, un río que corre en forma paralela y donde Ariel tiene una hermosa cabaña para pernoctar o parar al mediodía, en especial, cuando van llegando los días más calurosos y largos.
Gabriel y Ariel obtuvieron varios ejemplares de hasta cuatro kilos, muy peleadores, quizá a causa de que son peces acostumbrados a trajinar contra una corriente muy poderosa y a cazar, incluso, congéneres de gran tamaño, como bogas y sábalos que van pasando también por la orilla.
Un consejo importante: si es la primera vez que vas, no te sientas frustrado si no lográs hacer buenos tiros o si no clavás con eficacia. Se trata de una técnica que lleva un tiempo tomarle la mano, pero no es difícil, sobre todo, con guías que hacen lo posible para facilitarle la acción. Tratá siempre de lanzar en el lugar en que te indiquen los baquianos, no dejes pasar la oportunidad de tirar en todos los lugares de posible pique, pero tampoco te apresures. Tené siempre la punta de la caña hacia abajo apuntando al lugar donde cae el señuelo: así podrás contar con mayor arco para la clavada. La línea nunca debe estar floja ni con panza. Una vez que claves, no necesitás insistir con la clavada, como si se tratara de carnada natural. De todos modos, con señuelos de cuerpo, como los que habitualmente usamos para estas pescas, es muy común que en el cabezazo lo desprendan. Afilá bien los triples y, si son de mala calidad, reemplazalos para que nos los abran, al igual que las anillas, esos aritos pequeños que sujetan los triples.
Ariel deja la embarcación en el citado puente, de modo que es muy sencillo llegar desde casi todos los puntos cardinales, gracias a las autovías de las rutas 12 y 14. El camino para bajar hasta la guardería se encuentra en muy buen estado y, si bien la navegación hasta la zona de pesca, demanda cerca de una hora, van haciéndose algunas paradas para entrar en calor y, en más de una oportunidad, conseguir las primeras piezas del día.
Para contactarse con este guía: 011-15-3167-9643 o 0230-15-4581-486, contacto@prosilver.com.ar
Néstor Saavedra
para TurAireLibre
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