Por: Martín Calabro
Los años 80 fueron el periodo en el que exclusivamente se desarrollaron los estadounidenses Hüsker Dü, el trío formado por Bob Mould (guitarra), Greg Norton (bajo), y Grant Hart (batería). Cultores del hardcore punk, e identificados con el underground independiente más que con el mainstream, su nombre proviene de un vocablo de origen escandinavo (se traduce como “recorda que”). Se formaron en 1979, y un par de años después editan su primer disco al que titularon “Land Speed Record”, incluyendo 17 temas en poco más de 26 minutos. Con “New Day Rising” (su LP de 1985), alcanzan su pico creativo y de reconocimiento, con canciones como “Celebrated Summer” y la que le da título al álbum, logrando, para sus siguientes discos, abandonar su sello independiente y firmar contrato con la multinacional Warner Bros. Salvajes y emocionales, con sus guitarras distorsionadas, voces como aullidos y letras políticas consiguieron un estilo propio, y colaboraron para elevar al punk a la categoría de arte y filosofía. Separados a fines de 1987, su escaso éxito comercial fue compensado convirtiéndose en una influencia clave para grupos como Pixies y Nirvana, conjuntamente con toda la movida grunge de principios de los años 90, llegando a extender su legado fronteras afuera, en donde nuestros Massacre Palestina supieron tomar su bandera.
Escucha “It’s Not Funny Anymore”, incluida en el EP “Metal Circus” (1983).