Por: Marcos Stupenengo
Algunas zonas de la isla neoyorquina de Long Island sufren ya ligeras inundaciones debido a la subida de las aguas por el huracán “Sandy”, mientras que las autoridades de la región insistieron hoy en que se evacúen las zonas más amenazadas.
El huracán Sandy avanza con vientos de 130 kilómetros por hora hacia la costa este de Estados Unidos. La ciudad de Nueva York amaneció paralizada debido a la suspensión de operaciones de toda la red de transporte, así como escuelas, oficinas e incluso Wall Street.
El Departamento de Defensa ha activado efectivos de la Guardia Nacional en apoyo a los estados de Nueva York, Massachusetts, Virginia, Nueva Jersey, Delaware, Connecticut y Maryland ante la llegada del huracán “Sandy”.
La Guardia Nacional tiene 61.100 miembros disponibles para en caso de ser necesario ayudar a las autoridades civiles de emergencias en las tareas de ayuda en los estados a los que se espera que les afecte el huracán, informó el Pentágono.
El área metropolitana de Nueva York, donde viven unos 19 millones de personas, se encuentra desde esta noche sin transporte público (trenes de cercanías, metros y autobuses), también se han cerrado los parques y mañana estarán cerradas las escuelas, que atienden a 1,1 millones de estudiantes.
Las evacuaciones afectan a unos 375.000 habitantes de las zonas bajas de la ciudad más susceptibles de sufrir inundaciones por la combinación de las fuertes lluvias con una marea alta máxima. Se teme que el nivel de agua pueda subir hasta algo más de tres metros.
Debido al impacto por el paso del huracán Sandy por Nueva York, las autoridades ordenaron hoy el cierre de todos los edificios federales y cortes, además las actividades de la Bolsa de Valores de Nueva York fueron canceladas para este lunes.
Los partes meteorológicos indican que el fenómeno tocará tierra cerca de la próxima medianoche en un punto del vecino estado de Nueva Jersey con fuertes vientos y lluvias que también afectarán a la ciudad sede de Naciones Unidas.
Desde anoche todo el transporte público (metro, trenes, autobuses y ferris) quedó suspendido, así como las actividades escolares y de otro tipo y el tráfico por la mayoría de los puentes y túneles que unen el condado de Manhattan con Queens, Brooklyn y Staten Island.
Durante la primera parte de la mañana de este lunes Nueva York solo recibe una llovizna intermitente y vientos leves que deben llegar a fuerza de huracán en las últimas horas de la tarde, según los reportes meteorológicos.
Las autoridades advierten a la población sobre la inminencia de interrupciones en el servicio eléctrico y recomiendan el acopio de alimentos y agua para, al menos, tres días.