El regreso de los cupones del PBI

#WallStreet

Los cupones PBI son bonos atados al crecimiento del Producto Bruto Interno argentino que vencen el 15 de diciembre de 2035. No pagan capital, sino que pagan cupones anuales en la medida que el crecimiento del PBI supere un nivel preestablecido para cada año calendario. Su origen se remonta a la re-estructuración de deuda del año 2005 y fueron emitidos en tres monedas: el TVPP en pesos ley argentina, el TVPY en dólares ley Nueva York y el TVPE denominado en euros ley inglesa.

Indec_CartaFinanciera2

Durante las últimas dos semanas, dichos cupones observaron un retorno acumulado considerable del orden del 5,25%, 1,95% y 11,93% respectivamente en respuesta a los crecientes rumores en relación a la evolución de la economía argentina. Rumores que fueron confirmados en la jornada del viernes pasado, cuando el INDEC publicó que el crecimiento del PBI para el segundo trimestre rondó en el 8,26% interanual, una cifra mayor que la esperada por los mercados. ¿Qué significa esto para los inversores? Si se compara la primera mitad del 2013 contra el mismo período de 2012, la Argentina creció un 5,76%, lo que significa que para cumplir con la meta de crecimiento del 3,22% anual, el PBI del segundo semestre debería crecer solamente un 0,76%.

retornos_cartafinanciera

Durante el 2013 los cupones han ganado un retorno acumulado más que interesante, siendo el menor el del cupón en pesos con 50,58%, seguido del cupón en dólares con 51,24% y el TVPE en euros con un impresionante 81,61%. La combinación de una marcada tendencia alcista con un pago de cupón prácticamente certero a fines de 2014 genera un escenario ideal de inversión, sobre todo si se tiene en cuenta que sus precios todavía se encuentran en niveles inferiores a su valor teórico o fundamental.

Particularmente interesantes son el TVPY y TVPE denominados en dólares y euros respectivamente porque ofrecen la posibilidad de acceder a divisas en 2014, siendo el TVPE el preferido por encontrarse regido por ley inglesa y, por lo tanto, percibido con un menor riesgo de default en caso de que la Corte Suprema de los Estados Unidos falle a favor de los holdouts.

Puede leer el final de la nota haciendo click aquí.