Marzo puede considerarse el inicio oficial del calendario cinéfilo porteño. Desde hace seis años, en dicho mes viene realizándose el ciclo Les Avant Premieres, una selección que repasa lo mejor del cine contemporáneo francés aún no estrenado en nuestras salas. Esta edición, que constará de catorce películas, arrancará hoy jueves en Cinemark Palermo (Beruti 3399 – CABA) y se extenderá hasta el miércoles 19.
La presentación de Les Avant Premieres tuvo lugar ayer en la embajada francesa. Estuvieron presentes, entre otros, el embajador galo Jean-Michel Casa, la directora de la muestra Alejandra Cordes y Martin Provost, realizador de Violette, uno de los films seleccionados. Pero quien acaparó todos los flashes fue Mirtha Legrand, madrina del festival. “Todos saben que estoy ligada a Francia desde siempre -dijo la conductora-. Estuve casada con un francés y mi suegro fue embajador, además de mi apellido artístico. Creo que Argentina es un país francófilo”. Respecto al cine francés, la “Chiqui” afirmó que “tiene una personalidad única: puedo ver un película sin audio y reconocer que es francesa”, además de recordar sus visitas al Festival de Cannes.
Por su parte, el diplomático anunció los cincuenta años del acuerdo de cooperación cultural entre ambos países, que se celebrarán con la proyección del mismo número de películas a lo largo del año, y destacó “la valentía de los distribuidores, que son los verdaderos embajadores del cine francés en Argentina”. No faltó el recuerdo para Alain Resnais, director emblema de la Nouvelle Vague, recientemente fallecido.
El festival ofrece un menú de lo mas variado. Uno de los platos fuertes es El desconocido del lago, ganadora del premio a Mejor Director en la sección A Certain Regard del último Cannes. La película de Alain Guiraudie aborda una peligrosa relación de dos hombres a orillas de un lago. En tanto, Violette, el film que vino a presentar su director, tiene a la gran Emanulle Devos interpretando a Violette Leduc y su encuentro con la mismísima Simone de Beauvoir. Otro punto alto es Joven y bella, de Francois Ozon, que sigue el derrotero de una adolescente que se prostituye para pagar sus estudios. Como cada edición, el ciclo rescata una perla de otra época. En esta oportunidad, se proyectará Le joli mai, de 1963 y dirigida por Chris Marker, en donde su director sale, cámara en mano, a entrevistar a la población de París luego de la guerra con Argelia.
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