¿Cómo terminar con la lista de tareas pendientes?

#CoachingPersonal

to-do-list1Me encuentro con muchas personas que llegan frustrados a sus sesiones de coaching porque sienten que su “lista de cosas para hacer” no termina nunca.

Siempre digo que para poder diseñar futuro necesitamos hacernos cargo de nuestro pasado. Y hacernos cargo de nuestro pasado implica “estar al día con las cuestiones pendientes”.

Las listas o “to do list” nos invaden, tenemos aplicaciones para el celular, la laptop, la Tablet y podemos setearlas para que nos den avisos con diferentes alarmas. Parecería una herramienta casi mágica que nos ayudará a organizarnos para estar al día.

Pero hay algo fundamental y que ninguna de estas aplicaciones jamás nos advierte: nuestra lista de tareas pendientes debe ser nuestra amiga y no nuestra enemiga. Muchas veces las cuestiones pendientes crecen con una velocidad inmanejable y terminamos odiándola.

Entonces, les propongo que analicemos cómo poner fin a esta cuestión para ser nosotros los que manejemos nuestros pendientes y no nuestros pendientes los que nos manejan a nosotros.

El primer paso por supuesto es elaborar la lista de todas las cuestiones pendientes.

Para esto, lo mejor es tomarnos unos minutos junto a un lápiz y un papel y hacernos la pregunta “¿Qué cuestiones están sin completar?, algo que ayuda es pensar nuestra vida en función de áreas (vida personal, familiar, laboral, deportiva, etc.).
Es importante incluir todas las áreas y escribir en “modo tips” las cuestiones pendientes en cada una, sin limitarse.

Una vez que tenemos armada la lista y organizada por áreas, el segundo paso consiste en hacerlas tan cortas como sea posible.

Apelar a nuestra capacidad de síntesis es fundamental para activar nuestra habilidad proactiva. Cuanto más larga sea la tarea a realizar más peso sentirá nuestro cerebro al ejecutarla.

El tercer paso consiste en establecer las prioridades porque, como dice el refrán: “si todo es una prioridad, entonces nada es prioritario“.

El modelo B.I.S., que usamos habitualmente en nuestras capacitaciones y sesiones, nos ayuda mucho en este punto. La sigla B.I.S. consiste en detectar ¿qué es lo Básico, lo Importante y lo Superfluo?
Cuando podemos establecer el orden de prioridades accedemos a una sensación de bienestar y nos quitamos la presión que nos invade cuando creemos que “todo debe estar listo para ayer”.
Para esto podemos usar un color que marque lo Básico que nos indique todas las tareas que debemos realizar esta semana. Usar otro color que marque lo Importante que nos indique todas las tareas que debemos realizar durante los próximos 15 días. Y usar otro color que marque lo Superfluo que nos indique todas las tareas que debemos realizar pero que todavía no requieren una fecha determinada.

El cuarto paso consiste en pasar todas las cosas que marcamos como Básico e Importante a nuestro calendario y agendar una fecha, más a largo plazo, para revisar lo Superfluo.

Y el quinto y último paso es marcar todas las cosas que vamos completando, ya que marcar como completo los elementos de la lista alivia poco a poco la culpa y produce sensación de placer, ayudándonos a reconciliarnos con esa parte de nosotros que nos castiga por tener cuestiones pendientes.

¡Espero que esta información te sea útil!

¡Hasta la próxima!

Agostina Fasanella
Coach Ontológico
Liderarte Consultora