Por: Emilio Fatuzzo
La pintura es como la vida. Si no se apuesta todo no vale la pena.
La pintura es como la vida. No hay red de seguridad.
La pintura es como la vida. Muy peligrosa.
La pintura es como la vida. Nosotros somos nuestros propios maestros.
La pintura es como la vida. A veces necesitamos un guía, pero las desiciones son nuestras.
La pintura es como la vida. Se hace a nuestro antojo.
La pintura es como la vida. Lo único que importa es la Verdad y la Belleza.
La pintura es como la vida. No hay caminos preestablecidos, el camino que se emprende es el único.
La pintura es como la vida. La energía que no invertimos se convierte en una carga pesada que nos frena.
La pintura es como la vida. No necesitamos que nadie nos certifique que todo irá bien, el mismo impulso de nuestra decisión iluminará el camino (si es que hay camino).
La pintura es como la vida. Urgente. No podés perder ni un solo minuto. Es un lujo que no podés permitirte.
La pintura es como la vida. Muchas veces necesitamos emborracharnos para poder seguir.
La pintura es como la vida. Es necesario correr riesgos para dejar de existir en el tener y para llegar a su esencia.
Emilio Fatuzzo, Roma, 2010.
Ilustra: Henri Matisse