Por: Arlene Leiman
Las redes pueden ayudar enormemente a tu empresa como hemos visto en los post anteriores, siempre y cuando sean bien utilizadas. Pero es fácil caer en ciertos errores típicos que pueden perjudicar tu reputación online. A tener en cuenta:
1) No producir material suficientemente interesante
Conseguir clientes, en la social media se traduce en followers o ‘amigos’. O al menos potenciales clientes. Y para que se sumen a tu red y te lean, es necesario que mantengas su interés a toda costa. Para ello, lo principal es ofrecer contenidos de calidad, que sean originales e impliquen un material útil para el lector.
Es decir, que deberás ofrecer un servicio a través del material que subas, ya sea entretener o brindar una información específica.
Esta es la única forma de ganar potenciales clientes en el medio online.
2) Confundir los códigos
Facebook no es Twitter, y Twitter no es Pinterest. Cada red tiene su código específico y hasta un público determinado. No es lo mismo el contenido que demanda cada una de las redes ni el lector a quien te dirigirás en cada caso.
Es importante identificar y diferenciar a cada una de las redes en las que tengas presencia para respetar sus códigos y lenguaje.
Por otro lado, tampoco es imprescindible que estés en todas las redes; lo más recomendable es que selecciones según tu rubro y perfil de la empresa en cuáles es conveniente que tengas presencia y desarrolles contenidos específicos para ellas.
3) Volverte spam
De un modo muy fácil y rápido se puede pasar de ser una fuente de interés a ser spam. El límite es delicado y dependiendo de cómo te muevas en la red estarás de un lado o del otro.
Olvidate de insistir con comunicaciones del estilo gacetilla de prensa o autopromoción, esto no será considerado interesante por los lectores y automáticamente de eliminaran de su lista de amigos.
La publicidad en la red puede ser peligroso para tu negocio, quizá sea menos arriesgado y más eficiente que busques tener presencia con otro tipo de contenidos que te acerquen a tus potenciales clientes, en vez de alejarlos con publicidad.
4) Invitar a tus amigos de Facebook a eventos que no lo son
Para mostrar nuevas acciones de tu negocio no vale agendarlas como eventos e invitar a tus amigos, ya que perderás toda credibilidad.
Un evento es un evento, un espacio de participación, pero la información de tu nuevo producto no es un evento y no deberías incluirlo como tal.
5) No contribuir al feedback
No contestar las consultas, no devolver los comentarios o los “me gusta” o no estar atento a las sugerencias, por ejemplo, es cerrar un canal de comunicación rápido y directo que ayuda a que se genere una retroalimentación segura con tus lectores.