Por: Yanela Biancardi
Como ya charlamos en otras oportunidades, los eventos de incentivo dirigidos a los empleados son una tendencia instalada en el país. Muchas compañías, desde hace varios años, se lanzan a la organización de distintos tipos de encuentros y jornadas, que tienen como finalidad afianzar el vínculo de los trabajadores entre sí y con la compañía, e incentivarlos de cara al futuro. Es por ello que cada ocasión especial es una nueva oportunidad para que empresa y staff vivan una experiencia renovadora.
Esta vez, estamos frente al “Día del Niño”. Desde YB Creación de Eventos les acercamos las siguientes ideas, que – claro está – se adaptan a todos los requerimientos:
- Si la empresa cuenta con presupuesto para una acción de incentivo en el marco del “Día del Niño”, lo recomendable es un family day al aire libre. En una quinta, club o estancia pueden prepararse distintos juegos –como carreras de embolsados, cinchadas o “dígalo con mímica”, por ejemplo- que incluyan al empleado y su círculo íntimo, coordinados por especialistas en recreación. Las familias serán unidas, en equipos, que competirán durante la jornada. Debe tenerse en cuenta que el tiempo nos puede jugar una mala pasada, así que el lugar elegido tendrá que contar con un espacio cerrado para guarecerse en caso de lluvia, viento o intenso frío. Además, no deben olvidarse los premios a los ganadores y los presentes para el cierre del evento.
- Una visita al zoológico, para padres e hijos, es otra interesante alternativa. El Gerente de Recursos Humanos de la empresa, en coordinación con el organizador profesional de eventos, deberá comunicarse con la institución para solicitar la presencia de un guía profesional y el espacio exclusivo para la merienda.
- En caso de que el presupuesto sea acotado, puede optarse por recorridos guiados por la planta especialmente diseñados para los niños; plaza blanda, talleres de arte, obras de teatro, shows musicales o de magia. En estos casos, conviene organizar el evento por la tarde, al finalizar el horario escolar y la jornada laboral, para lograr una mayor convocatoria.
- Una alternativa que no implica un gasto importante de dinero pero redunda en creatividad es un concurso de dibujo. Cada padre o madre traerá de su casa una obra de su/s hijo/s, que será exhibida en las carteleras del lugar de trabajo. Tras unos días, los empleados podrán votar a sus favoritos, que serán luego premiados. El resto también recibirá un presente por haber participado.
- El sorteo de entradas de cine y teatro para obras infantiles, o de juguetes o programas de computadora, son buenas opciones.
Si se opta por jornadas completas de actividades padres-hijos, lo ideal es organizarlas un sábado, para garantizar la participación. En tanto, en los casos en los que la extensión del evento lo requiera, es fundamental pensar en un catering infantil que incluya snacks, galletitas, cupcakes, frutas, golosinas, gaseosas, jugos naturales y agua.
Finalmente, es importante destinar parte del presupuesto a obsequios como tazas, cups, remeras, pisapapeles, lapiceros, pins, pizarras, llaveros y/o lápices de colores con el logo de la firma.
Las acciones de incentivo que involucran a la familia de los empleados tienen como objetivo acercarla a la realidad laboral y que se sienta identificada con la compañía. Una actividad de fidelización que apunta a lo emotivo.
Espero que les sirvan estas ideas. ¡Buena semana!
Yanela