Por: Rafael Pérez Revilla
Ayer saltaba a las noticias el nombre de Dan Bilzerian, un multimillonario reconvertido en jugador de póker, que fue detenido acusado de delitos graves incluyendo la posesión o la fabricación de artefactos explosivos o incendiarios.
Si las cuentas de los Niños Ricos de Instagram nos habían dejado estupefactos la del “Rey de Instagram”, va un peldaño por encima mostrando una vida de continuos excesos fiesteros, que no solamente le ha encumbrado a coronarse como “Gallo de la red social”, sino también en un idolo de masas con 5 millones de fieles seguidores deseosos de hacer un “copy paste” de su suntuosa vida.
Hijo de Paul Bilzerian un ex-corredor de Bolsa de los 80 condenado por supuesto fraude. El padre de Dan se trasladó a Florida en el año 1978 dónde como corredor corporativo se dedicó hacer fortuna. Con 40 millones de dolares amasados se enfrentó a cargos contra fraude fiscal y pasó ocho meses en la cárcel. No fue hasta 1993 cuándo un tribunal le condenó a pagar una deuda de 62 millones.
La detención no hace más que aumentar el mito de éste individuo que llegó a ganar 10,8 millones de dólares (unos 8 millones de euros) en una sola partida de póker, quien también me recuerda a la ostentación de Kim Dot Com (el Gordo de Megaupload) en sus años en los que sacaba pecho siendo el Rey de las descargas en Internet.
Es tal el alarde por la ostentación que en una de sus actualizaciones en las que aparece mostrando un Jet Privado recién comprado dice: “Le dije a mi padre que había comprado este Gulfstream… el me dijo “Felicidades hijo, pero a tu edad yo tenía 3″ (I told my Dad I bought this G4, he said “congratulations son, by your age I had 3″ #FuckingOneUpsman).
A continuación una pequeña muestra de lo que su cuenta puede ofrecer, que más que la del “Rey de Instagram” la podríamos denominar como la “cuenta de hago lo que me sale de mis partes… y si no me dejan la compro”.
