Por: Sebastián Ortiz
El deporte, como parte de la Cultura, ofrece a quienes lo practican beneficios en diversos ámbitos directa e indirectamente: tanto en lo físico como en lo mental y social. Sin embargo la práctica deportiva no es algo que tenga mucha prensa en la actualidad. Hay un contraste notable entre la gran cantidad de personas que disfrutan de ver los deportes por la tele y los pocos que se deciden practicarlo.
Por qué la cultura del deporte pierde espacios en la vida diaria? Qué otras cosas ocupan su lugar? Qué hace el estado frente a esto? Los debates actuales tienen en cuenta la promoción, desarrollo y difusión masiva de estas actividades?
El deporte, y en particular el tenis es practicado por aquellos que tienen la posibilidad económica de sostenerlo por los costos que implican (raquetas, zapatillas especiales, alquiler de canchas, pelotas, bolsos etc.) y a su vez quien tiene aptitudes para el alto rendimiento debe poder solventar viajes y otros gastos de mayor envergadura. Esto hace que no sea accesible a cualquiera.
Simplemente con observar un hecho muy evidente podemos sacar alguna conclusión: los clubes están desapareciendo, las plazas dejan de ser ámbitos saludables para los niños, los espacios libres se transforman espacios construidos. Actualmente para jugar al tenis ó fútbol solamente queda la posibilidad de alquilar canchas (que cada vez hay menos y son por ello más costosas). El deporte tiende cada vez más a acoplarse al estilo de vida actual: consumista, individualista y aislado de la comunidad.
Las políticas en la materia deberían interesarse por esta realidad, y tener una participación más activa a través del aporte económico y de recurso humano, apuntando al deporte social dirigido a muchos, ofreciendo espacios adecuados para tal fin insertos en la comunidad (plazas, clubes, sociedades de fomento, polideportivos etc.) y acondicionados, fomentando así el interés por el deporte.
La difusión y práctica masiva ofrece, un camino, una dirección, un alojamiento para aquellos chicos que por no tener un lugar en la sociedad pierden las referencias y las consecuencias de ello se verifican a largo plazo en el creciente aumento de la delincuencia, adicciones, abandono escolar, etc.
Más allá de cualquier orientación política ó interés comercial creo que a la mayoría nos gustaría encontrarnos con un espacio en donde los chicos estén participando de un deporte, en lugar de evadirse de la realidad.
Si el tenis es tomado enserio en las políticas deportivas masivas se puede apuntar también a la detección de talentos, que se transformen en modelo a seguir de dedicación, esfuerzo y desarrollo de las capacidades y que empuje a otros a continuar en este camino.
Prof. Sebastián Ortiz
www.impactotenis.com.ar