Mientras se intenta dar la enésima vuelta a un caso y tema que ya no tiene vuelo, no me cuesta para nada afirmar que lo que se presentó el 5 de Mayo en el evento Be Witness es la momia de un niño de dos años. Así lo han comprobado las investigaciones de distintos colegas e incluso antropólogos, que se han sumado a un verdadero equipo internacional determinado en sacar la verdad a la luz. En el siguiente video te comparto un resumen de las evidencias más importantes recolectadas hasta el momento, las que alcanzan y sobran para confirmar que solo se ha tratado de un desafortunado evento mediático.
Muchas personas, sin embargo, deciden creer. No soy nadie para decirte que tenés que pensar o creer, pero cuando las evidencias hablan por si solas, cuando el mismo museo donde se exhibió la momia publica sus fotos y datos del hallazgo, no queda demasiado que analizar. Pero ante todo quiero destacar que lo que se ve en la foto, ante cualquier vista sensata, es una simple momia. Como aquel experimento realizado con niños de seis años a los que se les mostraran las diapositivas de Be Witness y en el que todos, sin saber de que se trataba, identificaron lo expuesto con “una momia”, deberíamos “limpiarnos” un poco la azotea y reconocer que, lo que se ve, de extraño no tiene nada.
Espero disfruten el video:
Fernando Silva Hildebrandt.
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