Por: Fernanda Jara
Esto pasa todos los fines de semana en una feria de Avellaneda donde venden aves exóticas. Según la denuncia de un lector, que llegó por mail, en muchas jaulas pueden tener a más de 10 aves grandes y más de 50 pequeñas, cosa que hace que muchas veces se aplasten o asfixien entre ellas.
Cuando eso sucede, simplemente tiran al animal muerto a un costado de cada puesto. Esta es una de las tantas aberraciones que suceden contra los animales. Los venden como juguetes, como objetos porque siempre quien delinque y lucra con la vida encuentra quien compre.
¡La vida no es negocio, ninguna especie merece tanto maltrato!
Esto sucede ante la mirada desentendida de policías que simplemente vigilan en que no haya robos en la zona.
¿Hasta cuándo esto va a seguir? Hasta que quienes compran dejen de hacerlo y hasta que las autoridades tomen cartas en el asunto.