Por: Julieta Botto
¿Será loco pensar que los libros nos evoquen aromas? Para nada. Y menos, todavía mucho menos, cuando sabemos que están hechos con amor.
Las editoriales infantiles están en franco ascenso en nuestro país –por si alguien está distraído, esta virtualidad mía está radicada en Buenos Aires, en la Argentina–, por eso es necesario tener un componente diferenciador. Y en algo de eso, sumado a parte de su historia, pensó Fabiana, creadora, editora y alma máter de Gerbera ediciones.
Esta casa editora tiene pocos años, aunque posee vasto número de títulos en su haber. Y lo que empezó siendo un sello de libros artesanales hechos en tela para bebés hoy es una editorial que se hace camino entre las de LIJ que se establecieron en los últimos años.
Pero los libros de Gerbera no son libros infantiles comunes, van más allá en la apuesta en cuanto a su mensaje. Los cuentos «tienen un valor agregado basado en el amor, la amistad, la diversidad y, sobre todo, en la inclusión social», describe Fabiana en la descripción para un catálogo de editoriales independientes.
«Nuestro objetivo principal es que a través de los cuentos los niños puedan incorporar principios básicos, como respetar las diferencias, cuidar el planeta, la naturaleza e integrar a todos por igual», continúa Fabiana. Es por eso que entre una de las particularidades de este proyecto está la de incorporar tipografías para disléxicos –confieso que desconocía su existencia–, pero que posee un diseño inclusivo para todo tipo de lector.
Y acá radica otra clave de Gerbera, otro de sus ases, de sus aciertos: contar lo que otros no hacen, narrar los sentimientos y sensaciones de los chicos en sus palabras y apuntando a la comprensión de ellos acerca de temas como el Asperger; las diferencias étnicas; el medio ambiente y las mudanzas, entre otros. Y en todos los casos se hace con respeto, cuidando fuertemente todo el contenido, tanto gráfico como literario. Y este es un punto que para nada se quiere dejar de lado: no dejan de ser libros de cuentos para niños, no son libros técnicos acerca de estas cuestiones.
Este sello tan fresco produce libros vitales, como la gerbera, la flor que le da su nombre y preferida de Fabiana, ¿casualidad?