Merche Vizcaya artista desde siempre

#ElArteVa

Soy artista desde “desde siempre” porque en realidad la creatividad es una capacidad existente en todos los individuos. La diferencia solo radica en que para mi fue una necesidad desarrollarla y para otros queda como algo potencial. El arte es elección.

(Merche Vizcaya)

Quién es?

Oriunda de la Provincia de Chaco, Merche Vizcaya es una gran acuarelista nacida en los años 50. 

Por influencia de su padre, decidió inclinarse por la abogacía. Estudió y egresó de la Universidad Nacional del Nordeste.

Su primera exposición la realizó en el Salón de Charata donde obtuvo el primer premio como estudiante. Más tarde se presentó al Salón del Museo ‘Timoteo Navarro’ de Tucumán, siendo nuevamente galardonada.

Luego siguieron otros premios, entre los que vale nombrar: Mención Especial “Dante Alighieri” en el XXXI Salón de Tucumán para el Ámbito Nacional de Pintura, Finalista del Primer Salón Municipal de la Provincia  de Corrientes, y fue distinguida por la Comisión del V Salón Nacional Fraternitas de Rosario.

En una entrevista con Infobae, la artista describió al arte como un gran movilizador y transformador social (…) es un lenguaje que permite ver lo polifacético del hombre.

En términos de Merche, el artista es una persona que “utiliza con libertad las formas y los colores, y de igual modo elige el material a usar, el soporte., etc.”  

Desde aquí, más definiciones de Vizcaya:

El artista se apropia de una parte de la realidad y la interpreta y la plasma como desea. En eso radica la fuerza que poseen algunas obras, en que su resultado es una realidad distinta, innovadora, que proviene de la óptica de su creador, que además, luego, se verá valorada y terminará de completarse con la colaboración del observador.

El arte es diversidad, como la vida misma. Por eso, lleva ínsito ser un acto de rebeldía y de entera libertad.

 

 

En mí el arte es orgánico, vital, como el agua o el aire, hace a mi existencia. 

 

La pintura me salva del conformismo, del aburrimiento, de los “infiernos cotidianos” y me brinda la cuota necesaria de esperanza para tener ganas de seguir creciendo.

El arte ha demostrado ser –entre tantas cosas- un gran mandala de muchas puntas, un universo donde todo es posible. Por eso no es solo una actividad, me refiero al arte como acción, es también un espacio, uno de los pocos contextos donde el creador “elige” y se expresa con absoluta libertad.

Me identifico más con la búsqueda, la curiosidad, con mis estados de ánimo. Tiene que ver más con la nostalgia, con las pérdidas y las carencias, con esa fuerza inefable que algunos llaman “alma”, con las esperanzas, con el permitirme poner en duda ciertos arquetipos, con  entender que no existe una sola realidad ni una única verdad. Nada es absoluto. Tiene que ver con revelar y rebelarse.

Estas son las motivaciones que me encuentran pintando.

Participó de muestras colectivas e individuales en diferentes galerías y salones: Galería de Artes “Artistas y Artesanos” de Resistencia, Centro Cultural Nordeste en adhesión al V  Concurso Nacional de Esculturas en Madera, Museo Provincial de Bellas Artes del Chaco, Club del Progreso: Primer Encuentro de Artistas Populares de la Provincia del Chaco, Muestra del “TANGO” en Centro Cultural Nordeste, Centro Cultural “Leopoldo Marechal” con motivo del Día Internacional de la Mujer, Primera Muestra Regional de Artes Plásticas “Mercosur 98” (Argentina, Brasil y Paraguay), Muestra de Pintura y Escultura “Buenos Aires Tango”, V Bienal Internacional de Acuarela en México, Palais de Glace- Salón Fundación Banco Nación, Museo de Bellas Artes de Tucumán “Timoteo Navarro”, Centro Cultural Misiones, Tel Aviv 2007, etc.

 

 

El arte es búsqueda, riesgo, desafíos, curiosidad. Es no resignarse ni abandonarse a las circunstancias. La muerte es azarosa, pero el arte es vida, es ir a un continuo encuentro. Es una rebelión contra el destino, una fuerza que se opone a la muerte. La Divina Comedia habla de un lugar, en donde los castigados no podían esperar nada, ni el dolor ni el placer, ni lo malo ni lo bueno, y ese según Dante, era el peor lugar del infierno. (Merche Vizcaya)