Por: Valeria Castro
Si hay un objeto decorativo que siempre suma, ¡ese es el almohadón!, ¿por qué será que nos gustan tanto los almohadones?, al menos a mí me encantan, no sé si coinciden; tal vez porque están asociados a la comodidad y al confort de una casa, o porque son elementos muy adaptables y mullidos.
Hay tantas variedades, formas, diseños, colores. Muchas veces cuando veo algún nuevo modelo original enseguida me dan ganas de comprármelo, pero luego reflexiono unos segundos y me doy cuenta de que tal vez no combina con mi casa y que además no es prioridad en este momento (estoy terminando la obra y si hago una lista de todo lo que nos falta aún “almohadón colorido” ocuparía el puesto 101).
Ok, claramente no me voy a comprar almohadones por ahora, pero sí les voy a dedicar una sección en este blog a todos los que veo y me parecen lindos 
, tal vez alguien ya esté en ese momento en el que sólo le faltan los almohadones para completar su espacio feliz y le sirva para inspirarse!
