“Si Dios quiere vamos a hacer campeones”

#FamososEnElMundial

Diego Gabriel Kravetz, abogado y ex legislador de la Ciudad de Buenos Aires se sumó a la fiebre mundialista y compartió con Infobae el entusiamo de disfrutar esta Copa del mundo junto a su hijo , entre emoción y figuritas.
Recuerda como sublime la mística que transmitió Maradona y todo el equipo en el mundial del 86 y asegura que si Dios, este año vamos a hacer campeones.

 

¿Cómo se prepara para el Mundial?
Yo estoy a full con la camiseta, con mi hijo juntando figuritas, con mis amigos hablando del día del partido y con mi mujer.

-¿Dónde, cómo y con quién ve los partidos?
Los veo con mi hijo, trato de ver con mi hijo todos los partidos; porque tiene 5 años y es una oportunidad única de compartir, ahora que entiende, que se pone la camiseta, que grita los goles. La verdad, es un placer gigantesco poder compartirlo con él.
-¿Cuál es su mejor recuerdo de los mundiales?
El mejor recuerdo para mí fue el del 86: lo que transmitía Maradona durante el Mundial y lo que fue el gol a los ingleses, levantar esa copa, viniendo de tan atrás. Porque era un mundial en donde nadie imaginaba que nos iba a ir bien y la verdad es que el equipo se puso compacto. Bilardo pudo transmitirles una idea y defendieron la camiseta a morir. Y la mística que transmitieron Maradona y todo el equipo en general fue sublime. Lo festejé como ningún título de fútbol en toda mi vida.

-¿Cábalas?
Principalmente, hay una camiseta que yo uso para ver los partidos que la repito siempre, que creo que nos dio algunas satisfacciones y creo que nos va a dar todavía más. Y creo que se podría generar una cábala nueva, que podría ser verlo con mi hijo. Si nos va bien, me imagino viéndolo toda la vida con él y me vuelvo loco. Sería lo mejor del mundo.

-¿Qué fue lo más gracioso o ridículo que hizo viendo un partido?
Decir barbaridades; echar al perro, compartir con el perro y si la cosa va mal, rajar al perro de al lado; decir cualquier improperio de todo tipo, orden y color sin llegar a ser el “Tano” Pasman. Pero la verdad es que se me ha ido la lengua más de una vez.

-¿Cómo ve a la Selección de Sabella?
Me parece que están los jugadores muy compenetrados con la posibilidad de ganar. Creo que se sienten que están en su momento. Me parece que hay un equipo, un grupo humano que tiene mucha hambre. Los veo con mucha posibilidades. De hecho, poder juntar en un mismo lugar a jugadores que están son reconocidos… y los que no son tan reconocidos vienen con mucha hambre. Si me preguntás, hasta te diría que hay una analogía con el 86, porque tenemos al mejor jugador del mundo y tenemos hasta algún Garré, porque tenemos a Rojo, que parece medio madera pero que veo que todo el grupo lo está bancando. Por eso veo algo de mística de equipo que se está armando, algo que no veo hace mucho tiempo.

-Mensaje para la Selección:
Que piensen que hay un país que está atrás de ellos, que está rabioso y hambriento de un título, que después de mucho tiempo no se veía ni se sentía con tantas posibilidades de poder gritar campeón. Tienen todo lo que siempre significó Argentina en fútbol: tienen fútbol, tienen corazón, tienen hambre. Es la oportunidad, es histórico.

-¿La política utiliza el Mundial para que ciertas cosas pasen inadvertidas?
Por supuesto, esta sensación de que hay un parate de un mes entero va a acompañada de la política que trata de que ese mes sea así; sobre todo cuando son gobierno y cuando las cosas no van del todo bien. Creo que, en este sentido, no hay que desatender los problemas cotidianos de la gente.
-¿Hasta dónde llega la Argentina?
Vamos a ser finalistas y, si Dios quiere, vamos a ser campeones.