Por: Mariano Marquevich
Detrás de cada cosa percibida o inventada. Hay una luz. Seguramente imagines que es blanca, amarilla, azúl. Pero no. Es sólo una luz.
Hay una sola luz. No tiene color. Brilla todo el tiempo, no ocurre en el tiempo. Es absoluta. Y nunca ocurrió.
Esa luz no puede cambiar.Y siempre igual y siempre mas. Siempre mas. Y no hay forma de dejar de verla. Porque con los ojos no se ve.
Cuando la experimentes no podrás aburrirte, porque no hay con qué. Hay una sola luz y no puedes disfrutarla. No tiene centro. Hay una sola luz y es en verdad lo que eres. Es en verdad lo que somos.
Ahora rendite. Desintegrate.
Ahora… Brilla.