Por: Mariano Marquevich
A ver si haces este ejercicio. Aunque sea imaginario. Se trata de un experimento subsidiado. Lo que sea que te cueste, hacé de cuenta que se te dará un dinero y no tendrás que ponerlo de tu bolsillo.
Ahora tomate el trabajo de preguntar donde van a estar cada uno de tus familiares, amigos y allegados mañana a las cinco de la tarde. Conseguí como puedas cada una de esas direcciones ya sea del trabajo, de las casas, de un café, una esquina, donde sea que ellos estimen que vayan a estar mañana a las cinco y anotalo.
Busca una foto tuya que te guste, puede ser una en la playa con amigos o de vos haciendo una pavada. Imprimila.
Llama a una empresa de taxis y encargate de hacerles llegar en mano, a cada uno de ellos, esa foto a las cinco de la tarde.
Sacando el trabajo de tener que conseguir las direcciones, aún si pudieras entregarselos con un click. ¿Lo seguirías haciendo?
Estoy seguro que no, al menos no a todos ellos. Sí a algunos (quizás…), no a todos.
La inmediatez y la facilidad de las redes sociales te llevan a que hagas cosas que conscientemente no harías nunca.
LLAVE MAESTRA
Recobra el poder.
Si quieren pueden ver un video de dos minutos que ilustra este fenómeno. Hacé click aquí
“Las heliografías tienen el aspecto de planos o urbanizaciones con cierta gracia surrealista. También pueden verse, de alguna manera, como una arquitectura de la locura. No me guía el propósito de significar algo definido; quien se enfrenta a estas obras es libre para establecer asociaciones y darles la interpretación que considere más acertada. Personalmente, cuando las veo terminadas, mi propia interpretación, que no limita ni excluye otras, es que estas obras expresan lo absurdo de la sociedad actual, esa suerte de locura cotidiana necesaria para que todo parezca normal.” León Ferrari