¿Por qué los cigarrillos no tienen fecha de vencimiento?

#MalditaNicotina

Diez meses después de su elaboración, los cigarrillos pierden sus supuestas propiedades. Sin embargo, los atados de Massalin Particulares (Marlboro, Philip Morris, Le Mans, L&M) ni siquiera tienen fecha de consumo preferente.

“Massalin Particulares aprovecha que la mayoría de las personas no sabe que el cigarrillo tiene una fecha de consumo preferente y mantiene indefinidamente en el mercado un producto que no pasaría el más mínimo examen de calidad”, explicó a #MalditaNicotina el abogado marplatense Máximo Sabater, quien demandó en septiembre del año pasado a la empresa por esa irregularidad.

Casi todos los productos de consumo tienen fecha de vencimiento. Incluso los que casi no se deterioran con el tiempo. Ocultarla permite acumular mercadería, una ventaja desleal y a costa de los consumidores, en este caso adictos, muy redituable en un contexto inflacionario como el actual. Todo lo que produce se vende.

En su línea de atención al cliente, Massalin Particulares reconoce que la fecha de caducidad “no se encuentra impresa”. Y admite: “En condiciones normales nuestros productos se mantienen frescos durante 10 meses. Después de ese período puede ser que no perciba el sabor que está acostumbrado”.

Entonces, si vence, ¿por qué no figura la fecha de caducidad? “La ley no lo requiere”, fue la respuesta a la consulta de este blog. No es verdad.

En su artículo 4º, la Ley de Defensa del Consumidor exige que el proveedor suministre “en forma cierta, clara y detallada todo lo relacionado con las características esenciales de los bienes”. Su importancia la interpreta Sabater: “Es todo lo que puede cambiar el consentimiento del comprador. Por ejemplo, nadie adquiriría un producto fabricado hace 3 años si al lado le ofrecen uno hecho la semana pasada”.

En Massalin Particulares ensayan una insólita justificación: “La compañía se encarga de asegurar que todos los productos tengan una alta rotación”. O sea que los consumidores dependen de la buena fe de una empresa que durante décadas ocultó los daños que provoca el cigarrillo a la salud.

Además del tabaco, los cigarrillos tienen otros componentes que se ven afectados por el paso del tiempo, como el papel o el filtro. Lo mismo ocurre con los aditivos. Pero cuando este blog se lo preguntó a Massalin Particulares, la respuesta fue una evasiva: “No podemos informarle”.

Decomiso

La demanda de Sabater, presentada junto a su colega Daniel Romeo, ya fue contestada. El próximo paso  es la apertura a prueba del expediente, que tramita en el Juzgado Civil y Comercial Nº 7 de Mar del Plata.

No obstante, los actores solicitaron una medida cautelar para que al menos en el partido bonaerense de General Pueyrredón se secuestren todos los atados de Massalin Particulares hasta que se verifique que cumplen con la ley. Antes que nada, la jueza Daniela V. Basso de Cirianni debería pronunciarse sobre esa petición.

“Nos dicen que vamos por la plata, pero no pedimos una cifra. Nuestro objetivo principal es que pongan la fecha de caducidad. Y, por supuesto, que se multe a la empresa teniendo en cuenta los montos de gran envergadura que manejan”, especifica Sabater.

La aclaración final no es menor: la ley contempla una sanción económica de hasta 5 millones de pesos, una cifra irrisoria para una industria que maneja miles de millones al año. Por caso, en una demanda gemela realizada en España se sugirió una multa de 150 millones de euros.

“En nuestro caso, por las presiones del sector terminaron archivando la demanda. No siempre se gana aunque se tenga razón”, comentó a #MalditaNicotina Hermenegildo García García, coordinador Ausbanc Consumo, la asociación que impulsó la denuncia en España, donde ningún paquete lleva fecha de consumo preferente.

En Argentina, en cambio, Nobleza Piccardo (Camel, Lucky Strike, Jockey, Kool) coloca la tibia advertencia “Mejor antes de” y una fecha.

¿Fecha codificada?

En su demanda, Sabater y Romeo concluyen que Massalin Particulares codifica una fecha.  “No lo negaron en su contestación porque está acabadamente probado”, alega Sabater.

El sistema de codificación constaría de dos números y una letra, que figuran en la estampilla fiscal (foto). “El primer número identificaría el año, el segundo, la semana, y la letra, el mes”, precisa Sabater.

Los abogados decodificaron las letras correspondientes a los meses de la siguiente manera:

S

U

F

I

N

O

P

L

A

C

E

R

E

F

M

A

M

J

J

A

S

O

N

D

Así, por ejemplo, el código 31O remitiría a la primera semana de junio de 2013. Lo que no está claro es si se trata de la fecha de consumo preferente o de elaboración.

Sin embargo, en su línea de atención al cliente Massalin Particulares asegura que “es un código de fabricación interno”.

La demanda nada dice de la presunta responsabilidad que le correspondería al Estado. Tampoco se pregunta si el cigarrillo vencido es aún más dañino. “No nos metimos con esos temas para evitar la discusión”, pormenoriza Sabater. Frente a una justicia lenta, evitar la controversia acorta los tiempos. Quedará para otro juicio.