Por: Anabella Reggiani
La luz es la materia prima de la fotografía. Básicamente sin luz no hay foto. En muy importante tener en cuenta la misma a la hora de sacar fotos en un espectáculo porque de ella depende que la imagen realmente muestre la esencia de un show.
La cámara lee la luz a través del exposímetro. Como lo dice su nombre es un dispositivo que nos dice si la exposición a la luz es correcta, si nos sobra luz (sobreexposición) o si nos falta (subexposición). Es decir que nos ayuda a detectar si la combinación de diafragma, obturación e ISO puestos en cámara son correctos o no. Todos los exposímetros están calibrados para leer universalmente la luz del mismo modo y exponen para una medida exacta de luz que se conoce popularmente como “gris medio”.
Lo primero que tenemos que conocer bien son los modos de medición de la luz que traen todas las cámaras reflex. Son tres opciones aunque algunas Canon traen cuatro. Estos modos nos permiten elegir entre las siguientes opciones: Medición evaluativa o promediada, Medición al centro de la escena y Medición puntual o spot. Pueden consultar los iconos correspondientes a sus cámaras en los manuales de las mismas.
A la hora de fotografiar un espectáculo, lo más importante es saber que no nos conviene elegir medición evaluativa. La misma hace un promedio de todas las luces de la escena, y es muy probable que la foto nos salga muy luminosa, tanto que incluso las zonas de sombra de la imagen se verán. Eso es justamente lo que no nos interesa que salga, muy por el contrario, lo ideal es mostrar contraste; mucho contraste entre las zonas de luces y sombras.
Lo ideal es utilizar medición puntual. La misma mide la luz que incide en una región muy pequeña del sensor que por lo general coincide aproximadamente con el cuadrado que suele indicar el enfoque en el sensor, es decir con ese pequeño puntito rojo que titila cuando estamos haciendo foco. Al elegir este modo de medición de la luz y apuntar a las luces altas de la escena. ¿Cuáles son esas luces? Son las luces más brillantes, esas que por lo general están de contra al espectador, que suelen encandilarnos cuando apenas las miramos. Al medir sobre ellas lo que logramos es generar alto contraste, de ese modo al disparar la foto las zonas de sombras se verán subexpuestas y lograremos escenificar toda la esencia de ese momento.
Les propongo practicar este primer consejo y si tienen dudas las pueden comentar abajo que las voy a ir respondiendo de a poco. En nuestra próxima entrega hablaremos de los usos de la velocidad de obturación.
Espero les haya resultado interesante!