Por: Juan Chiramberro
Alguna vez escuché a un alguien decir que no hay fanático más fiel, en el mundo de los fanáticos, que el fanático del alcaucil. Es que, el alcaucil, además de proporcionar propiedades medicinales, una vasta gama de vitaminas, potasio, fósforo y calcio, ofrece en el mundo gourmet una forma distinta de degustar el mundo.
El fanático del alcaucil espera ansioso que pase el invierno. Entonces, por un breve y eterno período, come alcauciles como plato principal, como entrada, como picada de esas que son previas a las entradas, o, simplemente, como minuta o acompañamiento, para empuje de otra cosa, para arrastrar lo que quedó en el plato o para darle un poco de color y volumen a la mesa.
Lo cierto es que el próximo sábado 4 (de 11 a 21 horas) y domingo 5 (11 a 19 horas) de octubre, en la ciudad de La Plata, se llevará adelante una nueva Fiesta del Alcaucil. Dicen, desde el Grupo de Productores de Alcachofas (quienes son parte de la organización de tamaño evento), que habrá concursos al respecto, muestras, talleres y espectáculos artísticos. Todo eso, girando, claro está, en derredor del eje protagonista. El lugar de los hechos será el histórico barrio de 17 y 71, conocido como Meridiano V.